“Estamos procurando volver a la escuela en los primeros días de agosto”, dijo a PRIMERA EDICIÓN el representante legal del Instituto Roque González, el padre Juan Rajimon, siempre que el Gobierno provincial así lo resuelva.
Hasta el momento, sólo regresarían a las aulas los últimos y primeros años de primaria y secundaria por ser considerados como grupos prioritarios, mientras que el resto de los alumnos todavía no tienen una fecha estimada para la vuelta. Pero, esa estimación es un proyecto sujeto a la definición de Educación de Misiones.
“Eso depende del Ministerio y hasta ahora pensamos que, de regresar a las aulas, lo harían los chicos de quinto y primer año de la secundaria, y primero y séptimo de la primaria”, explicó.
¿Cómo será el regreso?
Además de las cuestiones de limpieza e higiene básicas que el protocolo nacional exige a los establecimientos educativos, Rajimon contó cómo sería el regreso de los alumnos. En primer lugar, “se trabajaría con grupos y horarios reducidos”. Esto significa que los cursos se dividirían en dos turnos para que en cada aula haya aproximadamente 15 alumnos, como lo establece el protocolo nacional.
La modalidad de cursada sería de forma alternada: “Un día le correspondería a una mitad del curso, y al otro día va la otra mitad”, explicó y añadió que “los que no asistan a las clases presenciales ese día, tendrían clases virtuales como venimos trabajando durante estos meses”.
Por otra parte, Rajimon también se refirió a aquellos estudiantes que no asistirían al colegio. “Aquellos alumnos que tengan patologías respiratorias, van a continuar con la modalidad virtual”, aseguró. Asimismo, dijo que hasta el momento ningún padre se comunicó para avisar que su hijo no asistirá por otras razones que no sean enfermedades respiratorias, anticipándose a una eventual autorización para volver a las aulas.
Sin embargo “estamos enviando encuestas a las familias para tener un parámetro que nos permita evaluar la situación aunque yo creo que cuando estemos más cercanos a la fecha de inicio, los tutores se van a acercar personalmente para resolver cada caso de manera particular. Desde el diálogo se van a poder contemplar todas las decisiones”, apuntó.
En cuanto a los horarios, “está previsto que los alumnos de la secundaria ingresen de 7 a 10.35 horas, mientras que los de primaria entrarían a las 8 hasta las 11”, contó. Según el representante del Instituto, “la idea de los horarios diferentes es para que no haya aglomeración de gente”, mencionó.
Al respecto del dictado de las materias, aclaró que pese a que el horario se reduciría, “se planificó de manera tal que todas las materias puedan dictarse”, sostuvo. Sin embargo, recordó que las actividades extracurriculares o educación física, “por ahora no se realizarían”.
No fue sencillo
Finalmente, Rajimon mencionó a este Diario que elaborar un protocolo de regreso no fue una tarea sencilla y llevó un tiempo significativo.
“La dificultad estuvo en cada punto del protocolo, porque es una modalidad de regreso a la que no estamos acostumbrados. Todos los cuidados que indica el protocolo, como la distribución de los alumnos y carga horaria, la fusión de las clases presenciales y virtuales, la utilización de barbijos durante todo el horario de cursada… todo esto genera cierta complejidad”, concluyó.