El gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, defendió hoy el endurecimiento de la cuarentena en dicha provincia, que retornó a la fase 1, al sostener que se tomó esa medida para “interrumpir la circulación comunitaria” de coronavirus.
El lunes, el mandatario chaqueño firmó el decreto 702 que ordenó cerrar las fronteras de la provincia, una de las más afectadas por la pandemia, y dispuso, en cuatro localidades, el cese de todas las actividades no esenciales, inclusive de la venta de combustible, que sólo se expenderá tareas de seguridad y salud.
Sobre el cuadro de situación en la provincia, señaló que actualmente la tasa de duplicación de casos positivos es de 23.37 días, y una ocupación de la capacidad de camas de entre el 8 y el 11%.
“Estamos tomando medidas para interrumpir la circulación comunitaria. Estamos dando el máximo esfuerzo”, resaltó.
En diálogo con El Destape Radio, Capitanich recordó que Chaco fue “la primera provincia que tomó la decisión de cuarentena obligatoria”.
Consultado sobre la restricción a la venta de combustibles, explicó que tiene que ver con limitar la circulación vehicular. “Trabajamos muy detalladamente con los factores de riesgo como en los geriátricos, lugares de encierro y barrios populares. Hacemos el máximo esfuerzo desde el punto de vista de seguimiento”, destacó.
Fuente: Noticias Argentinas