Los uniformados tomaron conocimiento del caso ayer a las 14.20, a través de un llamado al 911 dando cuenta que corría peligro.
Una vez en la escena, una vivienda ubicada en inmediaciones de la calle 124 y avenida Francisco de Haro (jurisdicción comisaría Tercera) en Posadas, se encontraron con una joven que sostenía desde atrás a una mujer. Se trataba de la acusada y de su progenitora, de 37 años.
La víctima era sujetada del cuello por su hija con una de sus manos, mientras que con la otra esgrimía una tijera de metal. Los efectivos observaron que la víctima presentaba lesiones.
La joven amenazó a los policías, les gritó que si se acercaban lesionaría aún más a su madre, le hincaría el cuello sin temor.
La respuesta de los uniformados no demoró: abrieron el portón del inmueble sin ejercer violencia. Luego, cautelosamente, ingresaron manteniendo una distancia prudente y descartando todo tipo de elemento que pueda incomodar a la victimaria. El objetivo fue tranquilizarla. Dialogaron con ella y cuando bajó el brazo fue reducida de inmediato y detenida.
La víctima fue trasladada de inmediato y en ambulancia al Hospital Ramón Madariaga, donde recibió la atención médica por las lesiones que sufrió.
Se procedió al secuestro bajo actas legales de una tijera, que de acuerdo al informe de los efectivos fue la utilizada por la agresora para amenazar a su madre.
La joven fue llevada por personal del GIR la comisaría. Se investiga el hecho como “violencia familiar, lesiones y amenazas”.