“Seguimos vivos”, exclamaron los jugadores de El Decano, luego del gran triunfo que metieron ante Sporting de Santo Pipó por 2-0, con goles de Walter Ortega Solís, en un partido muy duro, áspero y muy peleado.
Con esta victoria, Atlético Posadas mantiene sus chances intactas de avanzar a la siguiente fase de la Zona 6 Litoral Norte del Torneo Regional Federal Amateur 2020 de fútbol.
En la semana, el DT local había probado un equipo con siete cambios, pero al final fueron cinco las modificaciones que realizó Néstor Gareca Jaquet para afrontar el juego ante el conjunto pipoceño.
No obstante, el cambio más importante estuvo en la cabeza de los jugadores de El Decano, quienes entendieron que estaba en juego la continuidad en el torneo y salieron a la cancha con una actitud muy superior a los dos partidos anteriores.
En este tipo de campeonatos, cuando no se puede jugar, la idea es llevar por delante a tu rival y así lo hizo El Deca. Superó ampliamente a Sporting y no dejó que los habilidosos de la visita tuvieran contacto con la pelota.
El ganador tuvo varios puntos altos, pero la intensidad puesta en cada pelota dividida marcó la diferencia en el juego. Además, volvió el goleador.
Ortega Solís volvió a aportar su característica lucha entre los centrales, ganó muchísimo por arriba y fue un muy buen complemento de Alan Almirón. Sin embargo, la mayor contribución a su equipo fueron las dos anotaciones, que llegaron por la vía aérea.
El primero fue tras un centro de Juan Eluchans a la salida de un tiro de esquina. El exIndependiente jugó cortó con Almirón y a la devolución metió un centro pase a la cabeza del Tanque. Primer gol en el torneo y desahogo para él.
A partir de ese momento intentó reaccionar el equipo pipoceño y si bien nunca encontró la manera de lastimar al Decano, tuvo una chance más que clara para llegar al empate.
Se durmió la defensa local, Guido Da Silva tirándose al piso la cruzó al segundo palo y cuando ya se aprestaba a festejar, apareció el central Lucas Florentín para salvar a su equipo. Todo Sporting se quedó protestando que la pelota traspasó la línea de gol y eso lo aprovechó El Deca.
La contra fue letal, porque otra vez se juntaron Eluchans, Almirón y Ortega Solis. Esta vez fue Alan el que puso un medido centro para el Tanque, quien sólo tuvo que desviar el balón para alejarlo de las manos del arquero Marcelo Montiel.
Nunca pudo haber sido tan precisa la aparición del nueve, ya que luego del segundo grito el árbitro Horacio Lutz marcó el final de la primera etapa.
A cuidar la ventaja
En los segundos 45′, el entrenador visitante dispuso una modificación táctica y en defensa apostó por una línea de tres con Diego García de líbero, Richard Presti y Nicolás Vallejos de stopper.
La idea funcionó en los primeros 10’, pero luego Sporting siguió careciendo de juego en la mitad de la cancha, porque la presión ejercida por los volantes locales fue muy superior a los de Santo Pipó.
En esta segunda etapa, la defensa local no se movió, ninguno de la línea defensiva pasó la mitad de cancha con la misión de no quedar desacomodados ante los peligrosos delanteros del Felino: el mencionado Da Silva, Tito Alegre y Hugo Troche.
Fue un segundo tiempo muy peleado, incluso en varios pasajes la pelota ni siquiera rodó por el campo de juego. La lucha por el balón en la mitad de la cancha derivó en varios encontronazos entre los jugadores de ambos equipos. Lutz empezó a revolear tarjetas amarillas, pero ni siquiera así pudo encarrilar el juego, muy cuestionado por el visitante.
El pitazo final llenó de alegría al Decano, que hizo propia la última oportunidad que tenía para conseguir los tres puntos y seguir vivo en el Regional Federal.