Cientos y cientos de personas se acercaron a dar su último adiós a la Stella Maris Leverberg, conductora desde 2003 de la Unión de Docentes de la Provincia de Misiones (UDPM) y, en forma simultánea, diputada nacional por la provincia de Misiones entre 2007 y 2015.
Una dirigente sindical y política de personalidad carismática e intensa que supo cosechar amigos y enemigos. Los que la quisieron -que fueron muchos- se acercaron a una sede gremial inusualmente tapiada de coronas de flores para despedirla y acompañar a sus familiares.
La mayoría de sus contrincantes políticos y sindicales expresaron sus condolencias, una de las primeras fue la secretaria general de la Unión de Docentes Argentinos, Mirta Chemes (UDA) quien escribió en su Twitter: “Vuela alto querida compañera Marilú, allá donde no hay dolor ni tristeza. Sólo paz y amor. Que brille para ella la luz que no tiene fin”.
En igual sintonía, la Unión de Trabajadores de la Educación de Misiones (UTEM) expresó sus condolencia a la familia “hacemos una pausa en las históricas diferencias que mantenemos, para expresar nuestro pesar a allegados y compañeros de militancia”.
Oberá la vio partir
Marilú fue velada en la sede del gremio en Oberá, la ciudad que ella adoptó como propia (nació en Bonpland) y donde se formó como docente.
El dolor tangible, tristeza generalizada e incertidumbre, se mezclaron con la búsqueda de explicaciones ante lo inesperado del hecho. La muerte de Marilú impactó fuertemente en toda la comunidad. A primera hora, la sede de la UDPM Oberá, que la había visto ingresar infinidad de veces, recibió educadores de toda la provincia, funcionarios de diferentes eslabones, amigos y vecinos.
El espacio fue ampliamente superado ante la masiva concurrencia. La arteria debió cortarse para evitar la congestión de vehículos que debieron quedar estacionados cubriendo varias cuadras cercanas. Su velorio estuvo pintado de celeste porque, en su honor, los docentes de la agrupación Adomis, de la que Marilú fue una de las fundadoras, acudieron con los característicos chalecos de ese color.
“Quedamos huérfanos”, manifestó una docente. “Más que la pérdida de una sindicalista, estamos despidiendo a una amiga, una mamá, una hermana. Todavía no caemos. Debemos ser lo que ella nos pedía, dirigentes responsables, fuertes. Ella siempre estuvo pendiente del otro, así la recuerdo”, señaló Renzo Galarza, parte del gremio.
A media mañana llegó al sepelio Florencia Gómez, la hija de Marilú que este viernes viajaba con ella en la camioneta conducida por Enzo Rubén Gómez (esposo de Marilú) y una amiga, Fany Ruloff. Vale recordar que Florencia fue la que menos lesiones sufrió en el trágico accidente que se cobró la vida de su madre, pues sólo tuvo algunas contusiones. En tanto, Enzo Gómez sufrió fractura de escápula y clavícula izquierda y fractura expuesta de pierna derecha y Fany Ruloff traumatismo de tórax severo y de cráneo.
La llegada de la joven fue un momento muy impactante. “Estamos acompañando a todos los compañeros, comisión directiva, allegados. Estamos todavía sorprendidos, asimilando todo. Trajimos a la hija que estaba internada y vamos a seguir acompañando para superar todo esto”, indicó Ruben Darío Caballero, secretario adjunto de UDPM.
“No estamos preparados para esto. Una gran compañera, una gran amiga, gran militante. A la que no teníamos necesidad de pedir nada, porque siempre estaba, con toda la fuerza, con toda la energía. Por eso es una tristeza inmensa esto que sentimos. Deja un gran hueco en todos nosotros y seguramente el tiempo nos va a ayudar a digerir este momento”, afirmó el intendente de Oberá, Carlos Fernandez.
“Una luchadora intensa. Hay sentimientos encontrados, dudas del por qué le tuvo que pasar esto. Debemos ayudar a que todo siga funcionando. Esto trasciende nuestra ciudad, la repercusión es a nivel nacional. Lamentamos muchísimo esta pérdida. Era incansable, se dedicó de lleno a lo que la motivaba que era ayudar. Por eso el reconocimiento que tiene y el dolor que causa su partida”.
“Gran pérdida humana institucional”
No fueron los docentes de Adomis los únicos en expresar su profundo dolor por su trágico fallecimiento. Acudieron juntos al velorio el velorio el gobernador y el vicegobernador Oscar Herrera Ahuad y Carlos Arce.
“Es una pérdida muy grande, en lo humano, en lo institucional. Las palabras sobran para describir estos momentos de mucha congoja, de mucho dolor. Asumimos toda la responsabilidad de ayudar y acompañar a la familia, los amigos cercanos, a todas esas personas el afecto y el cariño, para que tengan cristiana resignación. Los que estamos debemos acompañar a quienes sufren aún más por la cercanía, por la convivencia”, manifestó el Gobernador.
Herrera Ahuad la recordó por su actitud incansable. “Recuerdo el último mensaje de antes del accidente, gestionando por la garantía salarial de los docentes que confirmábamos y ella estaba muy feliz. Habíamos charlado todos estos días, tuvimos una actividad antes de fin de año, contentos porque habíamos abierto juntos una puerta a nivel nacional, que iba a ser muy importante para la provincia y lo va a ser en homenaje a ella”, aseguró.
Comentó que conoció la noticia por un audio del propio teléfono de Marilú, que le envió su hija Florencia contándole lo ocurrido.
“Lo más importante es la vida humana, el resto no. Hay un camino hecho. Hay semillas sembradas en una tierra muy fértil. Así que dará sus frutos. Por eso para quienes se preguntan y ahora qué pasa, lo institucional se resuelve. Lo humano es lo que no se puede remediar bajo ningún punto de vista. Por eso hoy estamos pensando solamente en eso, ayudando a la familia y rogando para que su esposo Enzo se ponga bien. Para que su hija y la otra persona también. Más allá del dolor físico que se pongan bien del dolor del alma. Es importante que la sociedad misionera entienda que estas cuestiones nos deben unir”, subrayó el mandatario.
Una defensora vehemente
También expresaron su dolor distintos funcionarios y referentes políticos de la renovación. Entre los mensajes más emotivos está el del ex gobernador y actual diputado provincial, Hugo Passalacqua, para quien era “una hermana de la vida”.
“Inmensa tristeza por el fallecimiento de una hermana de la vida: Marilú. Nos queda recordarte firme en la lucha, solidaria, familiera, apasionada y comprometida en la defensa de los derechos de la educación toda. Estarás siempre en mi corazón y en el de cada docente”, escribió en su Twitter para despedir a quien en numerosas oportunidades expresó su admiración y respeto.
También el ministro de Hacienda provincial, Adolfo Safrán, tuvo palabras contundentes para describir a Marilú: “Pocas veces me he cruzado con alguien que haya defendido con tanta vehemencia los derechos de sus representados como lo hizo Marilú por los docentes. Despido sentidamente a una gran militante, dirigente y amiga”.
“Comprometida con la provincia”
Así la definió el diputado nacional Diego Sartori, “quienes la conocimos, compartimos y tratamos con Marilú, nos deja su impronta de ser buena persona, buena amiga, comprometida con la provincia de Misiones. Así que con mucho dolor y mucha tristeza la despedimos, pero cuando uno es cristiano sabe que a esa cita no podemos faltar”.
Otro de los que viajaron a Oberá para acompañar a la familia de Marilú en tan duro momento fue el intendente de Posadas, Leonardo Stelatto, quien admitió estar “realmente acongojado por esta noticia y acompañando a los familiares de una gran luchadora de la educación de la provincia. Compartí muchos momentos con ella, en diferentes capacitaciones de educación vial pues nos acompañó en nuestra escuelita de educación vial. Este es un momento muy emotivo, Marilú puso en valor a los educadores e la provincia, ha luchado mucho, ha sido una diputada nacional con mucha participación en su defensa de los intereses de la sociedad misionera”, opinó el dirigente posadeño que estuvo al frente de la Dirección Provincial de Vialidad.