Bolsonaro se desafilió del Partido Social Liberal (PSL) con el que ganó las elecciones el año pasado, en medio de una fractura en el bloque parlamentario y un escándalo sobre desvío de dinero público del fondo electoral. Sus hijos Eduardo, diputado,y Flavio, senador, se fueron con él.
Para los analistas, este nuevo partido intenta agrupar al bolsonarismo puro, ubicado en la extrema derecha de Brasil, con un fuerte contenido religioso evangélico y la defensa del consevadurismo en las costumbres.
“Es posible que si no llegamos bien a la justicia electoral hasta marzo, no podamos participar de las elecciones municipales”, dijo Bolsonaro sobre el trámite para fundar una nueva agrupación política en forma electrónica, para lo cual necesita 500.000 firmas que estén certificadas.
Alianza, que será presidido por él, es el noveno partido de Bolsonaro desde que inició su carrera política en 1992. En el discurso de inauguración, su presidente dijo que aceptará críticas internas al gobierno, “pero con moderación”.
El ideario fue exhibido en la carta fundacional del partido como “el respeto a Dios y a la religión”, “el respeto a la identidad, memoria y cultura del pueblo” y la “defensa de la vida, de la legítima defensa y de la familia”.
Un fuerte compromiso contra el aborto y contra las “ideologías nefastas” fue incluida, en referencia al “socialismo, comunismo, nazifascismo y globalismo”. El partido dice que por más que Brasil sea constitucionalmente laico, “eso jamás significó un ateísmo obligatorio”. “El vínculo entre la nación y Cristo es intrínseco, fundamental e inseparable”, dice el acta de fundación.
Fuente: Agencia Nacional de Noticias Télam