“Creo que es una conversación muy positiva la que he tenido con el presidente Putin sobre Venezuela”, afirmó Trump a periodistas en la Casa Blanca, poco después de haber hablado durante más de una hora, sobre ese y otros temas, con el mandatario ruso.
Putin “no está pensando en absoluto en implicarse en Venezuela, más allá de que quiere ver que ocurra algo positivo en Venezuela, y yo siento lo mismo”, avanzó Trump.
Hasta ahora, tanto Estados Unidos como los restantes más de 50 países que desconocen el mandato actual del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, acusaban a Rusia de injerencia en el país caribeño a través de la presencia de efectivos y equipos militares.
En tanto, Putin subrayó a Trump que “la injerencia externa en los asuntos de Venezuela y los intentos de conseguir por la fuerza un cambio de gobierno en Caracas socavan las perspectivas de una solución política de la crisis”, según un comunicado del gobierno ruso citado por la agencia de noticias Sputnik.
La inesperada suavidad del jefe de la Casa Blanca contrasta con la tensión percibida dos días antes, cuando los protagonistas de una conversación telefónica entre ambos gobiernos fueron los cancilleres, Mike Pompeo y Serguei Lavrov.
Ese día, Pompeo sostuvo que “la intervención de Rusia y Cuba es desestabilizadora para Venezuela” y Lavrov, que “la injerencia de Estados Unidos en los asuntos internos de un país” es “una burda violación del derecho internacional”, según comunicados de las respectivas cancillerías.
La conversación entre Pompeo y Lavrov se produjo un día después del alzamiento cívico militar que buscó sin éxito sacar a Maduro del gobierno y que, según Pompeo, falló porque no contó con la complicidad de altos funcionarios chavistas que supuestamente la habían comprometido.
Fuente: Agencia de noticias Télam.