
El pasado 29 de octubre, la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) autorizó la venta en farmacias de la droga misoprostol para uso ginecológico bajo receta archivada que funciona para la interrupción del embarazo. Si bien todavía no está disponible en farmacias debido a que no hay stock en droguerías, el Colegio de Farmacéuticos de Misiones realizó una encuesta entre los profesionales que nuclea y el 93,6% de ellos prefiere que se siga distribuyendo en hospitales como ocurría hasta ahora.
El presidente del Colegio, Patricio Schiavo, señaló a PRIMERA EDICIÓN que “hay grupos que están trabajando para ver si se puede frenar o hacer que se entregue institucionalmente como era hasta ahora”. Para ello, “se estuvo haciendo una encuesta donde se consultaba si considerábamos propicio la venta de misoprostol en las farmacias”, afirmó.
“La encuesta puntualmente era qué opinaban sobre si debería ser exclusivamente hospitalario o no. No analizamos si se debe usar o no sino el ámbito en que debe ser utilizado”, afirmó la farmacéutica y diputada provincial por el Frente Renovador, Natalia Rodríguez, en diálogo con este Diario.
La encuesta surgió luego de la disposición 946 de la ANMAT en la que autorizó a Laboratorios Domínguez, productor de los comprimidos de uso ginecológico, a hacer presentaciones de uso en farmacias de venta bajo receta archivada. “Nosotros consideramos que el uso debe seguir siendo hospitalario”, afirmó Rodríguez e indicó que el 93,6% de los farmacéuticos así lo consideran. “Es muy riesgoso para la mujer que lo utiliza por lo que es una cuestión de resguardar esas vidas y también es teratogénico por lo que tiene efectos sobre el bebé en el caso de que sea mal utilizado o que se produzca un aborto incompleto”, agregó Rodríguez.
Esto derivó en la presentación de un proyecto de ley para que el uso siga siendo hospitalario dentro de la provincia de Misiones. “Lo presenté a principios de esta semana”, indicó Rodríguez a la vez que señaló que debido a lo contundente de la encuesta, el Colegio acompañará el proyecto presentado.
Hay antecedentes: tanto San Juan, desde 2012, como Mendoza, desde 2009, tienen leyes provinciales que indican que el medicamento para uso ginecológico sólo puede ser utilizado “en el ámbito hospitalario, institucional, sanitario y público” por lo que no se puede vender en farmacias. Estas legislaciones provinciales están “inclusive antes” de la autorización de la ANMAT, afirmó la diputada provincial.
Como la Cámara de Representantes se encuentra en receso, el proyecto no tomó estado parlamentario y todo indica que será tratado recién el año que viene a partir de mayo cuando se reinicie el periodo legislativo. Al respecto, Rodríguez indicó que habrá que esperar para saber el consenso que pueda llegar a tener con otras instituciones y profesionales “para que ésto sea una ley”.
Al margen de esto, cuando se anunció la disposición de la ANMAT se estableció fin de año como fecha de distribución por lo que, hasta tanto no se reanuden las sesiones en Cámara y sea tratado el proyecto, no hay impedimentos legales para la venta de misoprostol en las farmacias de Misiones. Al respecto, Schiavo afirmó que “hasta ahora no hay ninguna prohibición para que las farmacias adquieran el medicamento una vez que las droguerías lo tengan”.
Sin stock en droguerías
La droga, recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para la interrupción legal del embarazo, no se encuentra disponible en las farmacias de Misiones porque “todavía no figura en los stock de las droguerías por lo que las farmacias aún no nos podemos proveer de misoprostol”, indicó Schiavo.
El profesional explicó que ANMAT “autorizó la venta en farmacias de un producto que se llama Misop, de Laboratorios Domíguez, que es la presentación que se va a utilizar”. El Misop se venderá bajo receta médica doble archivada, lo que quiere decir que “debe ser una receta hecha por un médico de puño y letra, que además debe ser un profesional vinculado al uso del misoprostol. No puede ser un traumatólogo, por ejemplo, tiene que ser un ginecólogo o un obstetra, alguien vinculado a la utilización de dicho medicamento”, indicó Schiavo.
De igual manera, el misoprostol deberá ser recetado únicamente en los casos donde la interrupción del embarazo es legal según la legislación vigente: cuando representa un peligro para la vida de la mujer y este peligro no puede ser evitado por otros medios; cuando representa un peligro para la salud de la mujer (entendida la salud como el bienestar físico, mental-emocional y social); o si el embarazo proviene de una violación. “Es un medicamento indicado para la interrupción del embarazo pero en determinadas situaciones. Por eso también lo tiene que prescribir un médico especialista que sepa cuándo y sobre qué tipo de embarazo se puede utilizar misoprostol que, además, se va a ocupar de manera ambulatoria”, explicó Schiavo.
El farmacéutico indicó que la droga “no es para interrupción de cualquier tipo de embarazo” como ocurrió con “la pastilla del día después que fue utilizada como método anticonceptivo y no queremos que ésto ocurra con el misoprostol. Sino que sea para la interrupción de embarazo que están contemplados en la indicaciones que vienen en el prospecto adjunto”.