POSADAS. Las altas temperaturas registradas el último lunes sobre la capital provincial, con térmica de 52,3 grados centígrados, marcó un récord en el consumo de energía eléctrica, con picos máximos a las 14 y a las 20, lo que llevó a la empresa proveedora del servicio a efectuar “cortes preventivos” en algunos puntos de la ciudad con el objetivo de “preservar los transformadores”.Algunos de los complejos habitacionales del Iprodha -no todos-, ubicados en la zona de Itaembé Miní, sintieron la medida “preventiva” de Emsa el lunes. “Desde las 14 que comenzaron los problemas, hubo una caída de tensión, que no alcanzaba para encender un ventilador. Así estuvimos toda la tarde. Después, cerca de las 22, se restableció el servicio por casi una hora. Luego directamente se cortó la energía hasta las 2. Llamamos insistentemente a la guardia pero no nos atendieron porque estaban saturadas las líneas”, explicó Rosana González, una de las tantas vecinas que llamó a este medio para comentar sobre su experiencia.Roberto Acosta, del barrio Terrazas, apuntó que “fue una jornada difícil, creemos que se debió a que estaban realizando alguna tarea de mantenimiento. Agua tuvimos, pero si empiezan con los cortes de luz, después Samsa le culpará a Emsa que no tenían energía y por eso no podían bombear, nos quedaremos sin agua…espero instalen el famoso transformador que anunciaron que había llegado y que mejoraría el suministro para toda nuestra zona”.PRIMERA EDICIÓN, intentó en vano dialogar con alguno de los ingenieros de Emsa para tener un panorama técnico más certero, pero la orden que recibieron fue la de remitir todas las consultas al encargado de prensa, Carlos Martínez, quien enfatizó que no se trató de cortes programados. “Cuando la demanda de energía llega a su pico máximo debemos realizar cortes”, señaló en declaraciones a Radio República. También apuntó que “a las 14 (del lunes) se llegó a consumir 381.1 megavatios por hora. En esos casos los cortes se hacen por prevención ya que el sistema funciona al límite de su capacidad y si dejamos que siga trabajando así podemos provocar la avería de algún transformador o generar daños más graves. En definitiva, es cortar para que no consuma más de lo que puede dar”, explicó Martínez.También Martínez dijo que con el último registro de consumo zonificado, se estaba analizando la manera operativa de efectuar alguna conexión para llevar más energía a los sectores evaluados como más críticos.Por último, destacó que continúan con la ejecución de diferentes obras que pretenden “entren en servicio antes de fin de año, como la ampliación de Puerto Mineral y nuevos transformadores en Posadas que le darán mayor amplitud al sistema eléctrico”.
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