Para los investigadores del caso no hay dudas de que Juan Martín Carleris (22) mató a su pareja, Natalia Elisa Samaniego (25). El joven fue detenido al lado de la heladera donde el cuerpo estaba oculto y a pocos centímetros de donde apareció la carta en la que, se cree, confesó el hecho.
Sin embargo, la labor de los detectives consiste también en terminar de desechar cualquier otra teoría y, a la misma vez, sumar más elementos para probar la autoría.
Es en ese sentido que las pericias genéticas que se realizarán en la causa son consideradas determinantes o, más bien, concluyentes. Las mismas comenzaron a tomar forma días atrás, una vez que Carleris fue sometido a una extracción de sangre, material que se cotejará con los rastros encontrados en la misiva de índole esotérica.
La carta, que en exclusiva PRIMERA EDICIÓN presenta hoy por primera vez, fue firmada con sangre y será la genética la encargada ahora de confirmar las sospechas que tiene la Justicia sobre Carleris. También los peritos caligráficos, que cotejarán la escritura que presenta la misma con la del detenido.
Esos últimos especialistas tienen también una labor para nada sencilla, la de reconstruir a través de esas líneas de tinta las emociones y reacciones de quien la escribió, al momento en que lo hizo.
Recién entonces comenzará a conocerse si realmente la carta no fue más que una estrategia aceitada para fingir demencia o quizás emoción violenta, o verdaderamente una plegaria desesperada en busca de impunidad, lo que confirmaría que quien lo hizo tenía pleno conocimiento de que era un delito que se paga con la libertad.
Mientras tanto, Carleris continúa alojado en la Unidad Penal VI de Miguel Lanús. Las fuentes le aseguraron a este Diario que “está resignado”.
Sobre sus espaldas recayó semanas atrás un auto de prisión preventiva por el delito de “homicidio calificado por la relación de pareja”, que prevé una pena de prisión perpetua -35 años- en caso de que sea encontrado culpable. Así lo determinó el magistrado Marcelo Cardozo, titular del Juzgado de Instrucción 1 de Posadas.
El joven oriundo de Resistencia, Chaco, está detenido desde el mismo día en que todo se descubrió. Fue alrededor de las 19.30 del lunes 10 de septiembre, después de que un vecino de la avenida Santa Catalina casi López y Planes llamara a la Policía por el olor nauseabundo que provenía del departamento en el que vivía la pareja.
Ese hombre se acercó a la ventana del lugar y descubrió una impresionante cantidad de moscas en el interior. Cuando la Policía llegó, se confirmó la peor de las noticias: en el interior de una heladera que había sido cerrada “a la fuerza” con sábanas, yacía sin vida el cuerpo de Natalia. La autopsia estableció luego que Natalia fue estrangulada ocho días antes del hallazgo.
Fue shockeante no sólo ese hallazgo sino también el hecho de que Carleris, pareja de Samaniego, fuera encontrado acostado en la cama del departamento, aparentemente fuera de sí tras consumir psicotrópicos.
En el mismo lugar, la Policía encontró la carta, que desató toda una serie de hipótesis sobre lo sucedido en la escena. Saber qué y cómo pasó es lo que intenta determinar ahora la Justicia.