“El usuario no puede pagar más de $13, eso no está en discusión. Considero que es imposible que el salario del trabajador pueda absorber un nuevo incremento en la tarifa del transporte urbano”, aseguró el Defensor, quien añadió que el servicio está lejos de ser óptimo y recordó que presentaron una serie de reclamos a los empresarios pero no son resuelta con inmediatez “como lo necesita la gente” e incluso algunas exigencias todavía siguen sin resolverse.
En este sentido, Penayo expresó que “vamos a solicitar una tarifa social, que creo que es esencial para la realidad que vivimos. También es fundamental el cobro por tramos, una discusión que ya se tendría que haber empezado. Y es conveniente solicitar una tarifa cotizada por terceros, en este caso por la Universidad Nacional de Misiones. Con estos tres puntos vamos a llevar transparencia al usuario”.
Con respecto a la tarifa social, el Defensor explicó que “se presume que (el precio actual) los usuarios pueden asumir un monto acorde a sus ingresos, determinado por el Gobierno y podrán contar con este beneficio aquellos que reúnan una serie de variables a determinar por las partes. Estamos en un valor techo, no concibo que se hable de un boleto a 20, 25 o 50 pesos”.
Asimismo, sobre el cobro por tramos, Penayo detalló que “las empresas cobran un boleto por el viaje de punto a punto (cabeceras), cuando a veces viajamos menos de diez cuadras. Vamos a pedir que se instaure este debate, ya que nosotros no podemos acceder a los valores y a la composición de la tarifa técnica”.
Estimó que con el crecimiento poblacional y territorial que tuvo Gran Posadas, es necesario debatir la implementación de un boleto por tramos como ocurre en las grandes ciudades del país.
En cuanto al tercer punto, anticipó que “la UNaM tiene a técnicos capacitados para elaborar un cuadro tarifario, pero para ello se necesita que la empresa presente todos los registros. Por eso elevamos una recomendación al Intendente (Joaquín Losada) para que analice la postura de la Defensoría”.
Penayo reconoció que junto con el servicio de energía eléctrica y agua, “el transporte se convirtió en uno de los reclamos centrales que recibimos en la oficina”.
Destacó avances en la relación con representantes del monopolio, sin embargo, los usuarios siguen reclamando por el “arreglo de calles, que vincula a las dos partes y la reparación de refugios. Hemos evaluado el total de los requerimientos y sólo se logró el 30% de soluciones. El servicio tiene que ser real, con un buen funcionamiento de la unidades, del aire acondicionado, ventanas y cortinas en cada una de ellas, todavía hay un montón de cosas que no se hicieron”, aseveró Penayo.
Por último, el ombudsman indicó que “las políticas económicas implementadas por el Gobierno nacional no resultan coyunturales y entendemos que el sendero por el que debemos transitar actualmente requiere de una reformulación social y económica, donde cada provincia y municipio deberán decidir cómo transitarla. Instamos a que el esfuerzo sea compartido entre el Estado y los empresarios, a fin de evitar que el ajusta siga destruyendo el poder adquisitivo de los trabajadores”.
Audiencia pública
En el Centro de Convenciones de esta localidad se llevará a cabo hoy la Audiencia Pública para tratar el pedido del Grupo Z de una readecuación tarifaria en el boleto del transporte de pasajeros.
La cita comenzará a las 9 y será moderado por el representante del Ejecutivo municipal. Se estima que el primer orador será el representante de la empresa monopólica; luego será el turno del Defensor del Pueblo y dará lugar a la disertación de los usuarios. Se inscribieron 341 personas, pero se calcula que poco más de cien tomarán la palabra .
Cabe recordar que la convocatoria a la Audiencia Pública se disparó porque el Grupo Z presentó al Ejecutivo, vía nota, una suba del boleto con el argumento “que los costos de mantenimiento de las unidades se elevaron por la corrida cambiaria del dólar”.
El monopolio aduce que “la tarifa técnica para brindar el servicio debería ser de $57”.