De cada 100 personas de más de 60 años que residen en Misiones, 78 recibieron la primera dosis de la vacuna contra el COVID-19 pero, hasta el momento, sólo 9 de cada 100 lograron completar el esquema con la segunda dosis.
Según datos del sistema provincial (SIGEN) a los que accedió PRIMERA EDICIÓN, hasta ayer Misiones aplicó un total de 206.901 dosis de vacunas contra el COVID-19: 173.794 primeras dosis y 33.107 segunda dosis.
Hasta el momento, recibieron primera dosis 90.266 adultos mayores de 60 años (sobre una proyección poblacional estimada de 116.114 personas) y 10.364 segunda dosis. Además, se aplicaron 31.851 primeras dosis y 7.480 segunda dosis a personal estratégico; 17.973 primera dosis y 13.024 segunda dosis a personal de salud y 33.680 primera dosis y 2.237 segunda dosis a personas de 18 a 59 años con factores de riesgo. Bajo el rubro otros figuran 24 primeras dosis y 2 segunda dosis.
Vacunación a docentes
Misiones inmunizó contra el COVID-19 a 34.812 trabajadores del sistema educativo. Todos ellos recibieron la primera dosis de la vacuna (2.124 docentes y porteros con 60 o más años, 289 menores de 60 años con patologías, 2.480 directores y docentes del Nivel Inicial y modalidades, 2.923 referentes de dirección y gestión, 1.247 docentes de escuelas especiales, 7.604 maestros de primaria, 3.466 horas de primaria, 3.850 personal de apoyo a la enseñanza, 9.364 docentes del nivel secundario y formación profesional, 1.465 docentes y no docentes de institutos de educación superior.
De estos, sólo el 30% (10.413) recibieron la segunda dosis, siempre según datos oficiales.
El nuevo elemento estrella
Hace un año y medio, los oxímetros eran conocidos sólo por los médicos y un grupo muy reducido de pacientes. Pero, tras más de un año de pandemia y en medio de la segunda ola, los argentinos cada vez más deciden sumar el oxímetro a su botiquín familiar.
En Posadas, las farmacias más grandes cuentan con este instrumento que permite medir sin pinchazos la saturación de oxígeno en sangre. Los precios van de 4.500 a 6.500 pesos y según un relevamiento telefónico realizado por PRIMERA EDICIÓN, se registra una demanda sostenida de los oxímetros en las últimas semanas pero no tan alta como para agotar stock.
Este instrumento ayuda a determinar si la respiración está cumpliendo correctamente su misión de llevar oxígeno a las células; o si lo está haciendo de manera deficiente. Esto último puede ocurrir sin que la persona sienta nada extraño, un síntoma frecuente en el COVID-19, aunque tampoco está presente en todos los pacientes.
Los oxímetros de pulso miden el oxígeno en sangre a través de un sistema óptico y es indoloro para la persona.
Para hacer un control, se debe colocar la punta del dedo índice o mayor en una especie de broche del aparato y, luego de unos pocos minutos, aparecerá en su pantalla dos datos claves: frecuencia cardíaca y saturación de oxígeno en sangre. La saturación normal oscila entre 95% y 98%, aunque es habitual que algunos pacientes con EPOC midan menos.
Se recomienda que ante una saturación inferior al 92% se consulte al médico quien es el profesional que puede interpretar ese resultado en forma holística. En cuanto a la frecuencia cardíaca, el ritmo normal está entre 60 y 100 latidos. Lógicamente, se debe usar el oxímetro con reposo previo.
