A Guaraní no le sale una. Ayer tuvo en su manos la posibilidad de volver al triunfo y terminó masticando bronca, por un error propio que le permitió a Villa Dálmine alcanzar el empate 1-1 en el segundo tiempo.La Franja pagó caro un error, un mal cálculo del arquero Medina, ante un zapatazo de más de 30 metros de Diego Núñez, que significó el empate para la visita, en un partido que el equipo misionero lo ganaba bien por 1 a 0, al término del primer tiempo.La entrega, la presión y el rápido gol conseguido por Luciano Leguizamón, a los 16’ del primer tiempo, le daban a Guaraní un panorama diferente al de las últimas fechas.El tanto surgió en una gran jugada entre Sagarzazu y Ostrowski que terminó con el centro preciso que le permitió al ex River anotar el 1 a 0 de cachetada, aticipándose a la defensa visitante.Enseguida la Franja tuvo la chance para aumentar, pero el palo esta vez le negó la posibilidad de Leguizamón.En el segundo tiempo se vio otra versión de Guaraní, metido en su cancha y ya sin Leguizamón en el terreno.Fue cuando Villa Dálmine se adelantó un metros y con los cambios logró igualar un partido que Guaraní no lo pudo cerrar.El remate de casi media cancha de Núñez encontró totalmente desconcentrado a Medina y no hubo forma de detener el empate.El equipo misionero reaccionó tarde, pero sin precisión. Volvió a ceder terreno y el descenso cada vez está más cerca. El despegue tarda en llegar.
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