Los tres gendarmes que abrieron la ronda de testigos de este martes, ante el Tribunal Federal de Posadas en el debate que tiene como acusado de “transporte agravado de estupefaciente” al formoseño Diego Genaro Britos, coincidieron en que la camioneta en la que fue descubierto en el paraje Parehá de Montecarlo el 8 y 9 de abril de 2015, fue vista “limpiando el camino” a otros dos vehículos similares que movilizaron poco más de seis toneladas de marihuana hasta la vera de la ruta nacional 12.De los siete citados para declarar ante los jueces Norma Lampugnani, Manuel Jesús Moreira y Mario Hachiro Doi, sólo estos tres gendarmes comparecieron.Fue el sargento Tomás Cardozo (46) el primero en remarcar que la Toyota Hilux negra, en la que Britos aseguró que dormía en un predio privado frente a la ruta, fue identificada por las “llamativas llantas deportivas cromadas” y que era la misma que vieron moviéndose en varios sentidos saliendo de la costa del río Paraná. Consultado por la fiscal Vivian Andrea Barbosa, afirmó que participó de la requisa a la camioneta de Britos, y que vio cómo los testigos del procedimiento confirmaban que “el motor estaba caliente, al igual que el de la motocicleta hallada a pocos metros”. También remarcó que “los otros dos transportes interceptados estaban cargados con bolsas de marihuana”.El suboficial Oscar Narciso fue el segundo en sentarse a testimoniar. Sostuvo que a las “22.30 del 8 de abril de 2015” iniciaron el operativo en Parehá y observó los primeros movimientos “sospechosos de la camioneta de llantas cromadas y de la motocicleta que limpiaban el camino de controles”.“Luego vimos las otras dos camionetas que se acercaban hacia la ruta. Ahí desde una casita enfrente a donde estábamos ubicados comenzaron a hacerles señales de linterna o de luz con celulares. Se solicitó la intervención de una patrulla de Montecarlo y los vehículos fueron interceptados, los ocupantes corrieron al monte. Las dos camionetas estaban cargadas con bultos”.El último de los tres gendarmes que declararon ayer fue Guillermo Sebastián Barberis (24), cabo primero que coincidió en que la camioneta de Britos fue la que “llamó la atención por sus movimientos, por las llantas cromadas” y porque lo hacía “detrás de una motocicleta cuyo conductor portaba un casco naranja (…) Hacían lo que habitualmente se conoce como ‘abrir camino limpiando de controles’”. Los tres uniformados señalaron similares horarios y ubicación que tomaron en el operativo, principalmente con respecto al predio privado donde fue descubierta otra parte de los 6,312 kilogramos de marihuana, también la camioneta con Britos adentro y la motocicleta abandonada por su presunto cómplice.De acuerdo al auto de elevación a juicio, a la altura del kilómetro 1.554 de la ruta nacional 12 integrantes del Escuadrón X “Eldorado” de Gendarmería advirtieron una camioneta que entraba y salía de la ruta y se detenía cerca de una vivienda. Desde allí se observaron señales lumínicas hacia los vehículos que venían de la costa del río.Cuando las camionetas Toyota Hilux y Ford Ranger llegaron al asfalto fueron interceptadas y sus ocupantes huyeron a pie. Otro grupo de gendarmes se dirigió a las inmediaciones de la vivienda pero todos los que allí se encontraban escaparon. En el predio fue detectada otra camioneta Toyota y que dormía un hombre en el interior. Se identificó como Diego Genaro Britos (38), aseguró que nada tenía que ver con algún ilícito y que sólo descansaba en el lugar. Lo insólito del caso fue que el propietario del inmueble aseguró que no conocía a Britos y que no se animó a salir de su hogar por los movimientos extraños de las camionetas por la zona minutos antes.El juicio oral continuará hoy a partir de las 8.30 en la sala de audiencias del Tribunal Federal, sobre calle Félix de Azara casi Catamarca.
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