OBERÁ. El voluminoso expediente que contiene detalles sobre la agónica y sufrida muerte de Hugo Miguel Wasyluk, acaecida el 27 de abril de 2011 en la comisaría seccional Primera de Oberá, arribó al Tribunal Penal 1 de esta ciudad, donde se desarrollará el debate oral y público que juzgará la responsabilidad penal de trece policías.Fuentes consultadas catalogaron como “muy probable” que tras la feria judicial de invierno, que arrancará el 13 de julio para reanudar las actividades el 27 de ese mes, se inicien las cuestiones formales. Sin embargo, consideraron más probable que el juicio se lleve a cabo en los primeros meses de 2016, porque el calendario previsto para este año está colmado.Son trece los policías que deberán sentarse en el banquillo de los acusados, aunque con diferentes grados o niveles de responsabilidad. Los más comprometidos, ante una eventual sentencia condenatoria, son los policías Pedro De Mattos, Carlos Antonio Gómez y Ricardo Javier Rodríguez. Sobre ellos pesa la acusación de “tortura seguida de muerte”, que prevé un solo camino: la sentencia a prisión perpetua.Luego viene el resto: Jorge Antonio Heijo, Wilson Ricardo González, Miguel Ángel Espíndola, Hugo Ariel Basaraba, Carlos Ariel Lentini, Andrea Roxana Harasimezuk, Alejandro Fabián Núñez, Luis Alberto Silva, Gustavo Javier Fontana y José Orlando Morales.En este grupo, a algunos les compete la imputación de “incumplimiento de los deberes de funcionario público” y a otros, la de “omisión de denuncia”.Wasyluk fue alojado en la seccional Primera de Oberá el lunes 25 de abril de 2011 a la noche, luego de ser detenido en Villa Bonita. A la 0.20 del miércoles 27 fue hallado muerto en el calabozo número 2 de la mencionada comisaría, sentado sobre el inodoro. “Mamá, traeme frazadas, dame comida, tengo hambre”, fueron las palabras que repitió varias veces Wasyluk mientras estuvo alojado en esa celda, según consta en la causa.Uno de los acusados contó esos detalles a la Justicia y reconoció que el 26 de abril, a la mañana, “sólo se controló la celda 1 y la 2, donde estaba Wasyluk, no se abrió”. Esa misma mañana, el uniformado en cuestión, al entregar la guardia, dejó constancia en el libro de que “no coincidía el informe médico con lo que presentaba el detenido”.Wasyluk murió, según la autopsia, por “un shock hipovolémico y asfixia por aspiración de líquido intestinal”. El cadáver presentaba “múltiples lesiones traumáticas a nivel torácico de tipo compresivas, producidas con gran peso”, de acuerdo a los forenses.
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