POSADAS. “La iniciativa de ser amables es nuestra. No se trata de ver primero cómo actúan los demás. Nosotros podemos mostrar cómo queremos relacionarnos”. La frase escrita en el pizarrón de la Escuela de Frontera 606 de Santa María la escribieron el 9 de abril, día en que llegaron a visitarlos doce integrantes de la Asociación Civil “Presente”, padrinos de escuelas rurales de La Plata.Durante ese día y los que siguieron para entregar las donaciones recolectadas en la campaña “Presente abraza a Misiones”, la amabilidad, el amor y la solidaridad fueron homenajeadas. El resultado fueron cientos de rostros sonrientes. Los de los alumnos y docentes de esta escuela; los de los niños y padres de las comunidades guaraníes Iraka Mirí y Ojo de Agua, de Concepción; los de Lorena Gómez y todos los integrantes de “Presente” que viajaron y también los de los miles de voluntarios que día a día colaboran con esa asociación para lograr que llegue a Misiones el camión cargado con pupitres, cuadernos, frazadas, colchones, zapatillas y alimentos.Kilómetros de solidaridad Los viajeros solidarios llegaron a Misiones en tres camionetas particulares, seguidos por un gran camión que el día anterior habían cargado con ayuda de decenas de voluntarios platenses. El primer desembarco fue en la Escuela 606, que visitaron por primera vez. Allí compartieron dos horas con los 160 alumnos que esperaban ansiosos el show del mago de la Red Magos Solidarios (Red Maso). La mañana acompañó con un sol radiante los juegos y canciones que interpretaron los niños. Antes de irse, “Presente” les entregó alimentos para el comedor escolar, también útiles y calzados.“Compartimos un momento muy hermoso, los chicos, los padres y docentes, todos muy cálidos. Ahora quedamos en contacto con esa escuela y nos queda pendiente enviar algunas cosas que no entraron en el camión y quedaron en La Plata, como un pizarrón que nos pidió la maestra y más calzados”, dijo a PRIMERA EDICIÓN Lorena Gómez, representante de la asociación, quien viajó junto a su esposo, Fabián, y su hija Camila. “Así que si alguno de los lectores del diario puede darnos una mano con el traslado de estas donaciones a esta escuela, estaremos agradecidos”, agregó con una voz en la que persiste el entusiasmo del encuentro vivido apenas unos días atrás.Un reencuentro Tras la visita a la institución hicieron una rápida pasada por la Escuela 204 de Concepción, donde trabaja el maestro que hace las veces de contacto telefónico, ya que en la zona es difícil encontrar señal para los celulares. De allí partieron por caminos de tierra rumbo a Ojo de Agua, en la que sería su tercera visita a la aldea mbya, con la que colaboran hace dos años, tras conocerla por intermedio de una maestra. “La gente de la comunidad estaba esperándonos. Sentimos una gran apertura hacia nosotros y eso fue una gran satisfacción”, dijo Gómez, resaltando que “ahora es como que podemos empezar a trabajar juntos, ir consiguiendo lo que ellos estén necesitando puntualmente”.Allí entregaron camas, frazadas, herramientas para fabricar más camas, alimentos no perecederos. “Por primera vez pude reunirme con las mujeres de la aldea, algo que quería hacer pero las veces anteriores no pude, porque hay muchas cuestiones culturales, en que los hombres son los que deciden, y también hay mucha desconfianza porque han sufrido muchos daños y mentiras, entonces es lógico que tengan esas reservas”, indicó.Las mujeres la llevaron a conocer cada vivienda, que son ranchitos de madera, tierra, cartón y plásticos. “Viven en condiciones realmente muy precarias, sin abrigo y a veces pasan días sin comer”, agregó la platense, quien claramente en la cuenta Facebook de la asociación detalla: “Duermen en el piso y no es por cultura, sino porque no tienen donde”.En el equipo de visitantes también estuvo un oftalmólogo, quien revisó a niños y adultos, recetó anteojos y entregó unos cuantos a los que los necesitaban.Fútbol interaldeaEntre las cientos y cientos de donaciones también entregaron dos equipos completos de camiseta y pantalones de fútbol. Uno para la aldea Iraka Mirí y otro para Ojo de Agua, que va acompañado de pelotas y banners con el nombre de la aldea. Felices, los 22 jugadores, estrenaron sus conjuntos en un partido que jugaron en la cancha de césped silvestre que tienen en medio de la selva.Maestro ejemplarEn relación a Ojo de Agua, Gómez destacó la participación del maestro Santiago Moreira, auxiliar en Educación Intercultural Bilingüe (EIB), quien trabaja desde marzo sin cobrar un sueldo. “Está muy preparado, en la comunidad lo aprecian muchísimo y se nota que tiene muchas ganas de trabajar con los chicos y la comunidad, así que estamos pidiendo que por favor, de corazón, lo nombren para que se pueda quedar a ejercer allí”, dijo la voluntaria. De no ser nombrado, Moreira podrá continuar hasta julio, ya que lógicamente necesita obtener ingresos para vivir. Durante la visita, el maestro pidió pinturas para pintar la aldea, herramientas para construir en madera y semillas para hacer una huerta.Una red nacionalEn este caso también las redes sociales son el nexo que hace que miles de personas puedan aportar su granito de arena para hacer que estas familias puedan estar un poco mejor. “Sigo tejiendo cuadraditos para más frazadas”, puede leerse como comentario en una de las fotos de la cuenta facebook de “Presente Escuelas Rurales”. Con estos pequeños tejidos de diez por diez luego arman frazadas para donar. En total, entre tejidas y donadas, trajeron 130 frazadas a Misiones.“No podré ir a ayudar a cargar el camión, pero en la próxima estaré ahí”, comentan otros. “Gracias a todos por colaborar con Misiones y, como siempre decimos… vamos por más”, comenta Lorena Gómez entre las cientos de imágenes que retratan visitas solidarias a Santiago del Estero y Misiones.Tras cada visita, “Presente” regresó a La Plata con una larga lista de necesidades bien concretas con las que se propone ayudar a las escuelas y aldeas. La principal necesidad es de alimentos. Para reunirlos, además de solicitarlos por la red, organizan comidas y eventos artísticos donde la entrada es un alimento no perecedero.“Lo que nos van donando lo pasamos a buscar por las casas y lo guardamos en las casas de la gente de la asociación, porque no tenemos sede”, dijo Gómez; lo que da la pauta de que no se necesitan grandes galpones para dep
ósito, ni una flota de camiones cuando las ganas de ayudar están tan vivas… tan presentes.





Discussion about this post