Las violencias digitales se convirtieron en un riesgo latente para menores que acceden a dispositivos tecnológicos a edades cada vez más tempranas. Mensajes agresivos, difusión de fotos sin permiso y apuestas online conforman solo una parte del complejo panorama.
Para dar respuesta a esta problemática desde el ámbito escolar, la Dirección de TIC del Ministerio de Educación provincial informó que elabora un protocolo para la prevención, detección y actuación ante riesgos y violencias digitales en las escuelas, con la colaboración de otras instituciones.
El documento, que aún se encuentra en etapa de borrador, busca acercar conocimientos sobre este tipo de violencias para poder identificarlas e intervenir adecuadamente. Apunta principalmente a estudiantes, docentes y equipos directivos de los establecimientos escolares, pero también a promover el rol activo de las familias.
Alejandra Pacheco, directora de TIC de la cartera educativa provincial, explicó en diálogo con FM 89.3 Santa María de las Misiones que el protocolo “hace una síntesis de cada una de esas violencias (digitales) para que el destinatario o la persona que debe actuar sepa cómo hacerlo”.
Este mes continuará el intercambio de aportes con otros organismos y se proyecta su implementación en escuelas provinciales de todos los niveles, de gestión pública y privada, a partir del ciclo lectivo 2026.
Detectar e intervenir
La hoja de ruta que plantea este nuevo documento a cargo de Educación plantea dos objetivos principales: por un lado, formar a la comunidad educativa para detectar tipos e indicadores de alerta de violencias digitales. Tras este primer paso, orientar la intervención en cada caso, para garantizar que sea rápida y adecuada.
En esta línea, valoró que estudiantes, docentes y familias “conocen más, entonces hablan más” del tema, pero remarcó que “hoy por hoy es necesario acercar a las instituciones educativas este protocolo para que puedan prevenir, detectar y actuar”.
Otro aspecto que complejiza esta problemática es que muchas veces se produce fuera del ámbito escolar, pero tiene incidencia directa en lo que ocurre en las aulas. Esto motiva el trabajo de prevención y sensibilización en las instituciones educativas.
“La prevención tiene que ser desde nivel inicial hasta la formación docente, lo mismo con la detección y la actuación. Para todos los niveles y modalidades y para todas las instituciones educativas”, aseguró Pacheco.
Prevenir desde las aulas
El diseño de este documento no se produce de manera aislada respecto al trabajo de la Dirección de TIC, precisó Pacheco, ya que desde 2017 desarrollan líneas de trabajo en las escuelas relacionadas con temáticas vinculadas a ciudadanía digital y riesgos de la violencia en estos entornos.
Entre las preocupaciones más destacadas, mencionó que aparecen el ciberbullying, el grooming y las apuestas online, además de la necesidad de adaptar a cada edad y actualizar de manera continua el abordaje de esta problemática, debido a su vínculo con las nuevas tecnologías.
En este sentido, mencionó que el rango de edades más vulnerables es variable y atado a las situaciones que enfrentan los estudiantes, pero un dato destacado es que la exposición a dispositivos tecnológicos se produce a edades cada vez más tempranas, lo que motiva que también requieran conocer sobre el tema. “Cuando iniciamos los talleres, la idea era trabajar con 6° y 7° grado, 1° y 2° de la secundaria, pero los equipos directivos pidieron ‘por favor, necesitamos que estén los niños de tercer grado también para conocer esto’. Cada vez es menor la edad de los niños que necesitan conocer acerca de este tema”, cerró la directora.
