Un nuevo brote de sarampión pone en alerta a la Argentina, ya que en los primeros meses del año ya se han notificado más de 20 casos de sarampión; la mayoría de ellos en Buenos Aires y el restante en San Luis. Lo que pone en alerta a todas las provincias del país.
Esta jueves , el doctor Hugo Pizzi, reconocido infectólogo dialogó con la FM 89.3 Santa María de las Misiones y realizó un detallado diagnóstico de la situación, de qué es lo que pasó.
“Llegó una niña de Rusia, con el virus del sarampión. Cuando llega a su casa contamina a su hermana que no había viajado a Rusia, son niñas pequeñas. La hermana contamina al padre; el padre contamina a sus compañeros de trabajo. Los tres, el papá y las dos hermanas contaminan a todos los departamentos contiguos donde viven. Eso es un grupo de infectados que está en Palermo; los que están en este grupo sabemos que el contacto vino desde el exterior, por un viaje desde Rusia”.
“Pero, hay otro grupo que está en la localidad de Florencio Varela; al cual le llamamos ‘comunitario’; porque no podemos encontrar el origen. Además, para completar los 21 casos ya, tenemos un niño de San Luis de 8 meses, también infectado con sarampión”.

Luego de detallar el origen de los dos grupos existentes, más el caso aislado del bebé en San Luis, Pizzi reflexionó y dijo ” ¿Cómo se interpreta esto?. Se interpreta que si la persona que trajo el virus hubiera chocado contra alguien vacunado, el virus no progresaba”.
“¿Por qué entonces pasó a la hermana, de la hermana al padre, del padre a los compañeros de trabajo y después pasó a todos lo departamentos del edificio?. Evidentemente, porque eran personas que no estaban protegidas”, destacó, con un dejo de resignación ante la falta de vacunación entre los ciudadanos.
La vacunación incompleta y la falta de vacunación
Por otra parte, el doctor Pizzi dio a conocer datos basado en estadísticas nacionales: “Las personas que tienen la primera dosis, pero que no tienen la segunda son 110.000. O sea, niños, niños que no tienen la segunda son 110.000, o sea, se pusieron al año, pero no se pusieron el refuerzo a los cinco años; y eso es precupante. A su velas personas que directamente no se pusieron ni la primera ni la segunda, son 94.000″.
Luego de dar a conocer estos datos estadísticos, este especialista recordó que “hay un índice de nacimientos; y de ese índice de nacimientos, después se hace el seguimiento de cuántos nacidos recibieron las vacunas; entonces los números nos dicen ese faltante de vacunados”.
“Realmente cuando terminó la pandemia, es como que había gente que no se animaba a ir a los centros vacunatorios, porque tenían temor por contaminación al COVID; pero yo creo que acá están fallando los padres”.
“Recuerden ustedes que el agua potable y las vacunas nos han sacado de la Edad Media; y realmente les voy a dar un un dato que es ‘espeluznante’ y lo dice la Organización Mundial de la Salud. Si no existiera la vacuna contra el sarampión, supongamos que no haya sido descubierta, desde el año 2000 al año 2024 hubieran fallecido 60 millones de personas en el mundo”, destacó como dato inquietante.
El sarampión es muy contagioso y puede provocar la muerte
Pizzi remarcó que “El sarampión es problemático, mucho más que la varicela, pero muchísimo más”.
“El sarampión es la enfermedad más contagiosa que existe. Un niño que está con sarampión puede contaminar en una sola jornada escolar a todos sus compañeros y a la maestra inclusive. Para que vean la velocidad de contagio que tiene, casi como la del COVID o más”, detalló.
Luego se encargó de explicar que “esta enfermedad empieza como un cuadro gripal, con conjuntivitis y manchas rojizas, pero hasta ahí la enfermedad parece un cuadro gripal, por la fiebre, los dolores musculares y demás. Pero, el virus puede ir a a pulmón, que es una de las causas de muerte; y da la neumonía. O puede ir al cerebro y da la encefalitis, que es la otra causa de muerte. Entonces, cuando nosotros tenemos ‘ óbito por sarampión’, es una de esas dos causas”.
También aclaró :“La vacuna obligatoria es al año de vida y se llama la triple viral, que es contra sarampión, rubéola y papera y luego se debe hacer un refuerzo a los 5 años de vida; y después ya no más. Pero si hay algún temor o duda, el ser humano se puede vacunar a cualquier edad, si lo cree necesario”
“Es muy probable que se que se haga una campaña nacional de vacunación contra el sarampión, porque estamos preocupados. Ha bajado mucho el índice de vacunación en el país, tanto que ya nos superó Chile y Uruguay, países que jamás nos habían ni siquiera igualado”, anticipó con un claro guiño de preocupación por este avance del sarampión en la Argentina el infectólogo Hugo Pizzi.