Los cortes de carne vacuna subieron cerca de 20% en Misiones durante noviembre y se espera otro salto de 10% antes de las fiestas de diciembre, según empresarios locales y estimaciones del mercado nacional.
La situación para frigoríficos y carnicerías en 2024 no ha sido buena. Las ventas han caído cerca de 30% respecto a años anteriores y las estadísticas nacionales hablan del consumo per cápita más bajo en los últimos 28 años, descendiendo a 47,2 kilos anuales.
Los productores ganaderos y frigoríficos anticipan otro incremento del 10% antes de fin de año, seguido de una recomposición en 2025 debido a un “atraso” respecto a la inflación.
Sin embargo, el sector también estará condicionado por el nivel de consumo ya que, al ser un bien perecedero, se debe acomodar rápidamente al bolsillo de los compradores para evitar que se eche a perder.
En este sentido, el empresario cárnico de Posadas, Abel Motte, sostuvo que el sector atraviesa un período “negativo” debido a que “ha sufrido una caída muy grande de consumo, no menos de un 30, 35%”. Evaluó que “se debe a la falta de poder adquisitivo”.
En declaraciones a FM 89.3 Santa María de las Misiones, explicó que se registró un aumento “acumulado en las últimas dos semanas de noviembre de un 20%” y recordó que, sin tener en cuenta este 20%, la carne “tuvo un acomodo del 40 al 50% durante 2024, contra una inflación que estaba pisando el 200. O sea, la carne tiene un retraso en materia inflacionaria muy importante”.
Aclaró que “esto que está pasando es un acomodo” pero fue cauto respecto a los próximos aumentos: “Si va a tener aumento o no, eso es imposible de confirmarlo, porque hay que ver lo que aguanta el mercado. Si la carne no se consume, la carne no sube”, dijo.
Sin embargo, los referentes nacionales anticipan que está previsto otro 10%.
“Lo que hemos visto esta semana, con una recuperación del 10%, es una recuperación parcial. Yo no creo que sea total esa recuperación de acá a fin de año. Hay margen de otro 10%, pero recién el año que viene me parece que vamos a tener esa recomposición de precios”, aseguró Daniel Urcia, vocal del Instituto de la Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA).
El también presidente de la Federación de Industrias Frigoríficas Regionales Argentinas (FIFRA) se refirió a un “atraso significativo” en el precio de la carne con respecto a la inflación. “El precio de la carne en octubre, de la nalga, por ejemplo, si yo lo proyectaba en enero y lo actualizaba por IPC, me daba 14 mil pesos. Y lo pagábamos en promedio 8 mil”, detalló, en declaraciones a Radio Mitre. Ese desfase se debe, según mencionó, a la mayor oferta y al hecho de que el país venía de una sequía prolongada.
Reemplazo por otros bienes
Motte explicó que “sin duda la gente buscó bienes de reemplazo, como el pollo, como el cerdo. Las cantidades también han cambiado mucho, mucha molida, muchos cortes de segunda”.
Aclaró que el pollo y el cerdo “están más económicos” pero “igualmente, están en suba permanente”. Dijo que la suba reciente “es un acomodo permanente de precios. Pero está más económico el cerdo que la carne vacuna”.
Un informe elaborado por los analistas Franco Ramseyer, Emilce Terré y Julio Calzada, de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), detalla que el consumo “per cápita” de carne porcina se ha duplicado en los últimos 12 años, pasando de un promedio anual por habitante de alrededor de 8,6 kilos en 2012 a un consumo estimado en 17 kilos por habitante en 2024.
Este fenómeno no solo responde a cambios en los hábitos alimenticios, sino también a una oferta pujante que crece año a año en cantidad y en calidad, y a los precios pagados por el consumidor, que se ubican por debajo de los de la carne vacuna.
Expectativa por las fiestas
Abel Motte explicó que empezaron las consultas “sobre el tema de asados, pecetos, lengua, los productos de fiesta, pero por ahora consultas, incrementos de venta por la fiesta no se ven todavía”.
Recordó que el movimiento fuerte “el año pasado empezó el 21 de diciembre”, en cercanías del pago de aguinaldo de la administración pública. Y sostuvo: “Los días 23 y 24 son los de mayor venta. No hay una venta anticipada que se pueda destacar”.
Dijo que este año tuvieron que apelar mucho a “combos, al programa Ahora Carne” y que “se trata de hacer todo para bajar la mayor cantidad posible los costos, pero ahora con estas subas justificadas que tuvo la carne, se alejó más todavía de la billetera del consumidor”.
Y sobre el 2025 anticipó que “si no se reactiva el mercado interno, el panorama es malo”.
“La macroeconomía está muy bien. Ahora en la micro, con sueldos de 300 mil pesos, las perspectivas son negativas. Acá hay un problema del poder adquisitivo, y depende de la actividad económica, y la actividad económica en el mercado interno está replanchada”, finalizó.