El boliviano de 30 años, Cristopher Andrei Cueto Lazcano, procesado por narcotráfico y fugado de su detención domiciliaria en Posadas, fue extraditado desde su país la semana pasada y aguardará ser juzgado por una causa que se inició en 2014.
En noviembre de 2015 fingió una enfermedad autoinmune y logró el arresto domiciliario pero desapareció de la pieza de inquilinato de la zona oeste de esta capital.
Se trata del presunto narcopiloto que integraba la banda de María Alejandra “Muñeca” Fernández, una organización dedicada a traficar marihuana desde Paraguay a Córdoba.
Fue detenido el 19 de agosto de 2014 por la Policía Federal en un campo de Toledo en Córdoba cuando aterrizó una avioneta Cessna 337 Skymaster cargada con poco más de 400 kilogramos de marihuana prensada.
El joven piloto y otros involucrados intentaron escapar en una camioneta, pero chocaron y continuaron con la fuga a pie, pero fueron interceptados y reducidos.
Cueto Lazcano cayó en la redada junto a siete cómplices, cinco de ellos argentinos. Unos días después, en la capital de Córdoba fueron apresados “La Muñeca” y luego su marido, Miguel Romero.
El Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Posadas ya juzgó a los siete sospechosos por “contrabando agravado de estupefacientes” y todos ya recuperaron la libertad. Resta ahora cerrar la causa con el juicio a Lazcano, quien fue descubierto en Tarija, Bolivia, el año pasado, con un pedido de captura de Interpol vigente. El juicio de extradición se realizó y se definió de manera favorable al pedido de la Justicia argentina y desde el miércoles 28 de agosto permanece detenido nuevamente bajo cuidado de la Policía Federal Argentina.