Por estas horas, Los Tucanes trabajan a contrarreloj para conseguir el apoyo necesario para poder decir presente en el 3° Campeonato Internacional de Sóftbol que se disputará del 18 al 21 de julio próximo.
Con los precios por las nubes, el único equipo de sóftbol de la provincia busca al menos conseguir el transporte hasta Paraná, Entre Ríos. “Hasta barajamos la posibilidad de viajar en un colectivo de línea”, graficó la difícil situación su entrenador José “Chapu” Valenzuela a EL DEPORTIVO.
En las últimas semanas, Los Tucanes recibieron dos invitaciones: una al Torneo Nacional de Selecciones “Infantil Mixto”, cuya tercera edición se disputará en Buenos Aires del 20 al 23 de junio; la otra al 3° Campeonato Internacional y 27° Campeonato Nacional de Sóftbol Infantil que se realizará del 18 al 21 de julio en Paraná, Entre Ríos.
Ni bien el profe, alumnos y papás se pusieron a hacer números, automáticamente decidieron bajarse del Nacional de Selecciones. “Es imposible cuando barajamos los costos”, dijo a EL DEPOR el entrenador.
“Nos bajamos del Torneo Nacional de Selecciones por la cuestión económica, no llegamos porque no tenemos los fondos para ir y ahora esperamos contar con la ayuda para el transporte para poder jugar el segundo objetivo, el Internacional. Nos invitan a varios eventos pero nuestro objetivo era jugar alguno de estos dos porque o sino se cae la parte emocional del grupo”, remarcó Valenzuela.
Entonces, la posibilidad de ir al Internacional sigue en pie, por ahora. “La única manera de confirmar es contando con el transporte. Para el albergue y los alimentos de los chicos podemos hacer un esfuerzo, los padres son muy versátiles en esa parte, pero el transporte se ha ido a las nubes”, remarcó Valenzuela.
Los Tucanes tienen hasta un mes antes del inicio del torneo para confirmar, es decir, la semana del 20 de junio. “Con los padres siempre hacemos actividades y hoy tenemos 220 mil pesos en caja, pero solo el transporte te requiere 1.400.000 pesos y estamos hablando del más barato. Y a eso hay que sumar el alojamiento, la cena por cuatro noches, el seguro, la inscripción y toda la logística, igual eso lo resolvemos. El tema es el transporte”, indicó el profe y aseguró que hasta barajaron la posibilidad de ir en colectivo de línea, una opción más barata pero que complica a un equipo.
“De la terminal de Paraná a los lugares de alojamiento, tenemos entre 8 y 10 kilómetros de distancia. ¿Cómo hacemos para movernos y ni hablar para ir a las canchas?”, se preguntó Valenzuela.
El profe, que no cobra por enseñar a los chicos en la escuelita de sóftbol que fundó en el Club de Educación, continúa golpeando puertas de quienes deciden y tienen chances de ayudarlo en busca de respuestas positivas.
Valenzuela y los papás del equipo no piensan darse por vencidos en conseguir que los chicos viajen a codearse con lo mejor del sóftbol nacional a nivel Infantil.