Una consultora económica nacional realizó un ranking de presión fiscal de las provincias al analizar los tributos Ingresos Brutos, Impuesto Automotor e Impuesto Inmobiliario y los resultados revelaron que Misiones retrocedió en el ranking en los últimos meses a raíz de mantener sus alícuotas iguales, al tiempo que otras jurisdicciones aumentaron.
La consultora FMyA que dirige el economista Fernando Marrul realizó el trabajo midiendo la presión fiscal calculada por habitante, poniendo el eje sobre cuánto le tocó abonar a cada ciudadano argentino durante 2023. El informe determinó que la Tierra Colorada se encuentra en sexto lugar.
De esta manera se observa un retroceso en la escala de presión fiscal de Misiones en el contexto nacional, teniendo en cuenta que se ubicaba entre los primeros lugares en años anteriores.
Según lo marcan datos del informe, el impuesto por Ingresos Brutos por habitante en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires alcanzó los $789.783. Le siguieron Neuquén con $503.244 y Tierra del Fuego con $300.583. Luego Santa Cruz, La Pampa y Misiones.
El impuesto sobre los Ingresos Brutos aplican todas las provincias argentinas sobre los ingresos obtenidos por las empresas involucradas en actividades comerciales, industriales, agrícolas, financieras o profesionales. Su alícuota depende del distrito y de la industria.
En el otro extremo, las provincias con menor carga de IIBB per cápita fueron: Santiago del Estero, Corrientes, Formosa y San Juan.
En cuanto al Impuesto Automotor, Misiones se encuentra en el puesto 14°, es decir que tiene trece jurisdicciones que cobran más. Lidera el ranking Tierra del Fuego con $89.370 por habitante, mientras que por debajo se ubica CABA con $46.018 y Chaco, $25.546. Las que menos cobran son Córdoba, Corrientes, Chubut y Formosa.
El Impuesto Automotor es la valuación fiscal que fija la Ordenanza Impositiva Anual, que se liquida de acuerdo al peso, modelo, año, origen del vehículo, etc; dando lugar a clasificarlo en distintas categorías.
Y finalmente, el estudio evalúa la situación de cada provincia argentina sobre el Impuesto Inmobiliario, donde también se encuentra en el decimocuarto lugar.
Las provincias que más Impuesto Inmobiliario cobran son La Pampa ($34.381), y Entre Ríos ($25.986). Si bien la Provincia de Buenos Aires suele ser la más criticada por estos tributos, no es la que mayor presión ejerce por habitante. En el caso del Impuesto Inmobiliario se encuentra en el tercer lugar de ranking.
En el otro extremo, las que menos gravan la tierra son Santa Cruz, Tierra del Fuego, Chubut y Chaco (tres de las cuatro de la Patagonia).
Copian la aduana fiscal
La aduana fiscal que Misiones creó hace varios años en el límite de ingreso al territorio y que fue muy criticada por el comercio y la oposición política, está sirviendo de modelo a otras provincias para instrumentar mecanismos similares de cobro anticipado o “pago a cuenta” de Ingresos Brutos en este tiempo de escasos recursos y ajuste de los fondos nacionales.
Primero fue Formosa y desde febrero Jujuy, que estando gobernada por el radical Gerardo Morales (hasta el año pasado) impulsó un mecanismo idéntico al misionero, que es continuado ahora por el mandatario Carlos Sadir.
El radicalismo misionero, que tanto cuestionó el esquema “recaudador” ahora tiene una provincia gobernada por su partido que aplica la misma receta para obtener fondos en tiempos de crisis.
Jujuy, al igual que Formosa o Misiones, pueden decomisar la mercadería si no se cumple con el pago a cuenta del Impuesto sobre los Ingresos Brutos en el puesto fronterizo.
El efecto contagio puede llegar a otras provincias, creando nuevos regímenes de pago a cuenta. Por este medio, se asegura el ingreso anticipado de dinero en las arcas provinciales.
La expansión de estos regímenes que ahora creó Jujuy, con un pago a cuenta de Ingresos Brutos en el puesto fronterizo, es una solución política que varias provincias están analizando, sobre todo las que tienen pocas rutas de ingreso, para compensar el brutal ajuste y el recorte de fondos de la Nación.