La carqueja o jaguarete ka’a, como se la conoce popularmente en el Paraguay, pertenece al género Bacharis spp. Es una especie vegetal herbácea al principio de su desarrollo y con crecimiento secundario o leño después. Llega a alcanzar dos metros o más de altura desprovistas de hojas verdaderas, pero con tallos brillantes verde claro en un inicio y oscuro cuando maduran. Dichos tallos son bialados (Bacharis articulata) o trialados (Bacharis crispa y Bacharis trimera).
La inflorescencia es de un color blanco amarillenta se presenta en capítulos unisexuados, es una planta diclino-dioica, presentando los sexos en pies distintos (plantas distintas).
Las carquejas con originarias de América del Sur, crecen sobre terrenos altos, suelos rocosos, praderas, bordes de caminos, y en campos arenosos. La especie posee buena reproducción tanto por esqueje como por semilla y destaca por sus propiedades medicinales, digestivo, hepatoprotectora, colagogo, diurético, antidiarreico, febrífugo, cardiotónico, anticonceptivo y afrodisíaco.
En uso externo se emplea la decocción como antirreumático y antiséptico de heridas y úlceras. La infusión o decocción sirve para reducir el colesterol y combatir la diabetes, en asociación con yerba mate como abortiva.
En cada país donde crece tiene propiedades y usos semejantes y/o parecidos, se la usa de acuerdo a las costumbres y a la etnobotánica de cada pueblo o lugar. Además de medicinal dicen que se la utiliza como sustituto del lúpulo en la elaboración de cerveza o las hojas como jabón para el lavado de la ropa.
En su constitución química presenta varios componentes, la quercetina y acetato de carquejilo en el aceite esencial destacan en Bacharis trímera por sobre las demás especies. Las acciones farmacológicas destacadas mencionan actividad colerética-colagoga y antimicrobiana, detoxificante hepática y cardiotónica.
Al revisar en el Libro Azul de la Decodificación Biológica de E. Burón (2015), los aspectos desarmónicos del hígado y el corazón (órganos más afectados por la carqueja) reflejan estados de enojo, ira y descontento en el primero, reclamo, carencias y angustias el segundo. Los órganos poseen sus funciones fisiológicas y también su correlato emocional, siendo afectados por nuestros pensamientos, acciones e inacciones también.
Al movilizar el hígado y el corazón tal vez sería posible encontrar el recorrido de limpieza o detoxificación de aspectos que nos contaminan como así también, hallar los caminos del amor que provean mecanismos genuinos de sanación y/o búsqueda del equilibrio propiciando el bienestar.
Pasar del nombre carqueja o bacharis spp. al de jaguarete ka’a (té de fiera) traducido del guaraní, implica un movimiento que muchas veces damos de modo abrupto, hasta el más sofisticado puede volverse una bestia abominable que poco domina sus emociones y tentaciones, que premedita y prevé consecuencias y sortilegios.
La depuración, desintoxicación con dieta de especies medicinales es posible mediante dos o tres tazas de té en infusión al 01%, de jaguarete ka’a. Durante unos 21 días aproximadamente.
Mgter. Anahí Fleck
Magister en Neuropsicología.
0376-154-385152