La Asociación de Trabajadores del Estado denunció que el intendente renovador de Hipólito Yrigoyen, Félix López, ordena a sus trabajadores que fumiguen zonas urbanas y rurales del municipio con glifosato para combatir las malezas.
El glifosato está prohibido por ley provincial en todos los ámbitos urbanos de Misiones y su aplicación pasará a ser prohibida en forma total, en todos los ámbitos de la producción de cualquier actividad, a partir de 2025 por otra ley sancionada por la Legislatura e impulsada por el conductor de la renovación, Carlos Rovira.
Lo grave es que desde los primeros meses de 2023 se informó de esta situación a los ministerios de Trabajo y de Ecología de la provincia para que intervengan, hagan cumplir las leyes vigentes y eviten el riesgo de salud que padecen trabajadores y vecinos “sin tener respuestas”, señaló ATE.
Además, el combate a las malezas se puede realizar mediante otros mecanismos, como desmalezamiento y aplicación de herbicidas que no sean contaminantes.
Desde el gremio advierten una clara contradicción entre lo que se sancionó por la Legislatura, con un discurso de provincia “verde” a la vanguardia del cuidado del medioambiente, con lo que ocurre en la realidad, donde este intendente desoye las normas y los ministerios encargados de intervenir no actúan.
En la primera semana de enero se viralizó un video donde dos municipales realizaban tareas de fumigación a la vera de los caminos vecinales a unos 100 metros de una vivienda, en el municipio de Hipólito Yrigoyen. Son entrevistados por un vecino y reconocen que el intendente y el “encargado” les ordenaron efectuar la fumigación con Roundup (nombre comercial del glifosato).
Este municipio está situado en el departamento de San Ignacio, a solo unos 60 km de Posadas, y cuenta con una población urbana y rural de unas 2.500 personas.
La última denuncia
En septiembre de 2023, ATE realizó la última presentación esperando que la provincia intervenga en el conflicto. PRIMERA EDICIÓN accedió a esa denuncia presentada en el Ministerio de Trabajo, con la firma de Miriam López (secretaria general adjunta) y Marcelo Grasiadei (secretario administrativo).
En la misma expresan que “los trabajadores del municipio de Hipólito Yrigoyen una vez más están atravesando situaciones de riesgo en su salud y seguridad a partir de tareas riesgosas, peligrosas y prohibidas que le otorga su empleador”.
Esas tareas consisten “en la fumigación de zonas urbanas con glifosato, sustancia cuya toxicidad y efectos adversos en la salud ya no se encuentran en tela de juicio desde el momento que el propio Estado de la provincia ha prohibido su uso por la ley XVI 124 en determinadas áreas con el objetivo de evitar el contacto directo, indirecto o derivado de la población con glifosato, sus componentes y afines que atenten contra su salud y la biodiversidad”.
Remarca el gremio que la progresividad de la prohibición del uso de glifosato, establecida en la ley sancionada por los diputados renovadores, “está pensada en contextos productivos y no en el caso para optimizar tareas propias del Estado municipal: desmantelamiento de zonas urbanas y peri urbanas que además puede ser realizado de formas que no pongan en riesgo la salud e integridad de los trabajadores ni de la población”.
Denuncias previas
Recuerdan que hubo denuncias previas sin ser escuchadas: “La tarea de fumigación en estas condiciones ya ha sido denunciada por ATE a partir de las denuncias recibidas de nuestros afiliados realizándose presentaciones ante el Ministerio de Ecología y este propio Ministerio de Trabajo y al intendente del municipio”.
Se acompañaron materiales probatorios, fotografías y vídeos que dan cuenta de la veracidad de la denuncia y se pidió intervención. “No obstante la situación se repite sin que haya habido información ni respuesta alguna de parte de los organismos antes referidos”.
“Los trabajadores siguen expuestos al riesgo como también la población”, advierte el gremio.
Y agrega que “la situación actual es que a los trabajadores municipales se le ha instruido reiniciar la fumigación en áreas urbanas y periurbanas en las mismas condiciones de riesgo”, denunciando que “no tienen realizadas capacitaciones de manipulación de las sustancias ni de los riesgos, no hay instructivo sobre el procedimiento ni las fórmulas o proporciones”.
Por último se solicita “la suspensión de las actividades de fumigación que fuera encomendada a los trabajadores del municipio” con el argumento de “la existencia de riesgo real, grave e inminente de daño a la salud e integridad de los trabajadores y los vecinos”.
La respuesta del intendente
Ante las primeras denuncias presentadas, en abril de 2023 el intendente López respondió por nota a ATE que el glifosato “está prohibido en zonas urbanas pero no en zonas suburbanas y rurales”.
Expresó también que “el municipio está trabajando para reemplazar la poca cantidad que se utiliza por herbicida bio orgánico cuya producción actual provincial no alcanza para abastecer los pedidos de la producción agrícola”.
Y que “se encuentra a disposición de los trabajadores guantes, máscara y ropa que muchas veces se niegan a usar”.
Por último sostuvo que “no existe ningún estudio médico científico que pruebe la afirmación no pudiéndose a la fecha establecer una relación entre el uso de glifosato y determinadas enfermedades”, contradiciendo lo que sancionaron los diputados renovadores en la ley aprobada en la Legislatura.