¿Por qué jugar con tu perro? Porque es cuando ambos pasan un buen rato juntos y todos queremos estar con quienes pasamos bien. Además, el juego desarrolla en tu perro habilidades de control y de estimulación mental.
Los juegos deben ser retadores y divertidos y tendrán reglas que respeten la integridad de tu perro. Debe estar bajo pautas y ser regulado por vos, el responsable de su bienestar.
Por sus beneficios, lo ideal es comenzar de cachorro:
• Desarrollas vínculo puesto que implica compartir recursos y respetar normas.
• Es la oportunidad de exponer a perros sensibles a movimientos más bruscos y a entornos con más ruidos o menos conocidos para él.
• El autocontrol en el juego es la capacidad que tiene nuestro perro de controlar conscientemente su impulso para hacer algo que le gusta.
Es importante marcar el tiempo y que no dure más de 5 minutos 2 veces al día. Para iniciar decís“¿Jugamos?” y mostrás su juguete o mordedor. Para finalizar, decís “Ya está” y guardas el juguete. El lugar es importante, un entorno tranquilo y alejado de distracciones. También, tené en cuenta el “cuándo” ya que no es recomendable jugar después de comer.
Un juego atractivo con tu cachorro es mover por el suelo el juguete de un lado a otro, simulando una “presa” y luego alejarlo de él. No cometas el error de darle golpes en la cara con el juguete o metérselo en la boca pues no es así como actúa una “presa”.
¡A jugar se ha dicho!
Colabora Laura Kuperman
Educadora Canina.
376 4-636-551