Vecinos de Arbo Waldimiro De Freitas y su esposa Marili Koene Mann, oyeron ayer pocos minutos después de las 18 una serie de estampidos de arma de fuego y cuando se acercaron a su vivienda hallaron la dramática escena de dos cuerpos desangrándose.
De acuerdo a fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN, el colono y jubilado de 70 años, por motivos que se desconocían hasta anoche, discutió con su pareja y le disparó con una escopeta recortada hasta verla desplomarse frente a su casa. Instantes después y presuntamente con la misma escopeta se descerrajó la sien.
Las mismas voces detallaron que lo que se investiga como un “femicidio, seguido de suicidio” se registró a la altura del kilómetro 961 de la ruta nacional 14 en las inmediaciones de Dos de Mayo, a seis kilómetros aproximadamente del casco urbano en el sentido hacia San Vicente.
Con la llegada del primer patrullero se confirmó que tanto De Freitas como Mann ya no tenían signos vitales por lo que se comunicó además al Juzgado de Instrucción de San Vicente sobre lo sucedido.
Mientras se aguardaba respuesta, se comisionó desde la Unidad Regional VIII (San Vicente) a miembros de la Policía Científica para las labores periciales de rigor. Mientras se realizaba la labor pasadas las 20 se solicitó por orden del juez Gerardo Casco, que los cuerpos sean trasladados de inmediato a la Morgue Judicial de Posadas para que se realice la autopsia correspondiente.
De lo transcendido de voces confiables, la secuencia del ataque no dejaría dudas que se desató tras una discusión cuando De Freitas esperaba la llegada de su pareja de trámites personales.
Se sospecha que la aguardaba con la escopeta a mano y que al menos cuatro detonaciones se escucharon. Las tres primeras perdigonadas impactaron en el cuerpo de Marili Mann y la última correspondió a la que el agresor se efectuó a modo suicida.
No trascendió si existieron denuncia previa por violencia de género o problemas de convivencia conflictiva.