La investigación se inició hace varios meses con efectivos de la Policía Federal Argentina quienes desde la Ciudad Autónoma de Buenos Aires comenzaron a registrar y seguir el movimiento de mercadería que, por las cantidades requeridas, sobrepasaban el consumo o la demanda que pudieran requerir Puerto Iguazú y localidades próximas.
El relevamiento derivó ayer en que el juez federal de Eldorado, Miguel Ángel Guerrero, ordenara once allanamientos en distintos puntos de Puerto Iguazú y se registraran seis detenciones y un cúmulo que no pudo ser determinado hasta anoche, de alimentos, artículos de limpieza, construcción y ferretería, entre otros rubros, todos bajo la sospecha de ser acopiados en depósitos clandestinos próximos a la ribera del Paraná para ser transportados clandestinamente para la venta al menudeo en jurisdicción de la localidad paraguaya de Presidente Franco.
Los procedimientos se iniciaron a las 7.30 y alcanzaron a tres locales de una cadena de supermercados perteneciente a una empresa exportadora. Entre los seis detenidos e incomunicados al menos hasta el lunes que el juez mencionado los indagará, se encuentra el propietario de esta firma mayorista.
De acuerdo a fuentes consultadas por PRIMERA EDICIÓN, entre los volúmenes secuestrados de mercaderías y documentaciones, se destacaron dos camiones repletos de pañales para bebés, pero también cargas de rollos plásticos para cercos perimetrales, artículos de aseo y perfumería y limpieza en general.

La maniobra de contrabando habría consistido en constantes cruces del río en embarcaciones pequeñas, con o sin motor, con estos insumos. Los investigadores ubicaron los transportes que recibían la mercadería y los puntos de acopio en barrios costeros de Puerto Iguazú.
De los once procedimientos se obtuvieron elementos para ampliar la investigación. Las mismas fuentes no pudieron estimar el monto en pesos de todo lo secuestrado, pero resaltaron que trabajan en el arqueo varios contadores para chequear documentos y mercadería.
A este Diario, y a modo de contextualizar la problemática, se remarcó que no solo se investiga la infracción al Código Aduanero, ley 22.415, sino también la comisión del delito de “asociación ilícita”.
“No se trata de contrabando de aceite de oliva o combustible a Paraguay, se sospecha de una red que podría llegar hasta varios sectores de Foz de Iguazú (Brasil) con diversos elementos para comercializar de fabricación argentina”, resumió una fuente directa de los operativos en Puerto Iguazú.