Un nuevo atropellamiento, esta vez de un ocelote, ocurrió ayer en el Parque Nacional Iguazú, sobre la ruta nacional 101, lo que volvió a poner en evidencia la falta de conciencia de los conductores que no respetan el límite de velocidad establecido como así también la ausencia de elementos de control que permitan sancionar a quienes lo infringen.
Desde la Fundación Vida Silvestre, “lamentamos la pérdida de este ocelote así como también la pérdida de todos los animales que mueren día a día en las rutas que atraviesan áreas naturales protegidas por conductores que no respetan los límites de velocidad”, indicó Emiliano Salvador, de la Fundación Vida Silvestre, a PRIMERA EDICIÓN.
A primera hora de la mañana, a través de las redes sociales, se conoció el video del felino que fue encontrado por los guardaparques ya muerto, a un costado de la ruta 101 en el tramo ubicado entre el ingreso al área de Cataratas y el control que posee Gendarmería Nacional en esa zona.
“Según una proyección que hicieron nuestros técnicos, son alrededor de 5.000 animales que se pierden al año por este tipo de siniestros, porque no son accidentes, sino más que nada falta de respeto de las normas de tránsito que están establecidas, principalmente dentro de las áreas naturales”, remarcó Salvador.
Recordó que “desde Vida Silvestre trabajamos desde hace muchos años y en forma intensa en la concientización, difusión y demás, pero estamos convencidos de que son necesarias más acciones concretas para controlar los límites de velocidad. Entendemos que son las autoridades de aplicación y las vialidades nacional y provincial las que deben tomar también cartas en el asunto”.
El 1º de julio último PRIMERA EDICIÓN había publicado un artículo en el cual la doctora en ciencias biológicas, María Paula Cruz, brindó valiosos datos sobre el ocelote, especie que consideró que se encuentra en la categoría de vulnerable. “Es una especie muy sensible al impacto humano, a los desmontes y atropellamientos, entre otros factores, que obligan a poner el acento en la protección y cuidado de la misma sin aguardar a que llegue a ser considerada en peligro de extinción”, dijo entonces.
Mediante el estudio que concentra datos obtenidos desde 2003, estimó que en el Parque Nacional Iguazú y la lindante Reserva Forestal San Jorge hay entre 140 y 180 ejemplares de ocelote.