El juez de Instrucción 7 de esta capital, Miguel Mattos, imputó ayer por “hurto agravado” a los dos cordobeses acusados de integrar la banda de los inhibidores de alarmas.
Ambos individuos fueron detenidos bajo sospecha de sustraer 3 millones y 100 mil pesos respectivamente de dos vehículos en Posadas, tal como adelantó PRIMERA EDICIÓN.
También los efectivos procuran dar con un tercer implicado quien sería oriundo de la capital provincial o al menos se lo considera la “pata” local y posiblemente el cabecilla o “datero” de la banda.
La búsqueda se centra en un automóvil Toyota Corolla blanco que quedó registrado en la cercanía de los lugares donde robaron el dinero mencionado de las dos camionetas.
Vale recordar que el pasado jueves a la madrugada la Policía de Paraná (Entre Ríos) capturó a los dos cordobeses, de 46 y 42 años, en un puesto caminero denominado Santa María. Viajaban a bordo de un vehículo Peugeot 301 gris que también quedó plasmado en el registro fílmico para la investigación de los tres hechos denunciados en Posadas. Tras su detención, efectivos de la División Robos y Hurtos dependiente de la dirección Investigaciones Complejas, viajaron a Entre Ríos donde sus pares les entregaron la custodia de los cordobeses.
Los tres robos
El primer caso se registró de acuerdo a filmaciones de cámaras de seguridad, el lunes 28 de agosto durante la mañana. La víctima fue un hombre de 55 años oriundo de Corrientes quien dio cuenta que de su camioneta Volkswagen Amarok blanca estacionada en jurisdicción de la comisaría Tercera de la UR-I de Posadas, le robaron 3 millones de pesos guardados en un maletín, una computadora, un par de lentes para sol y una chequera.
El martes 29 de agosto en tanto, un comerciante de 59 años denunció que ingresaron a su camioneta 4×4 estacionada sobre avenida Comandante Rosales y que sorprendió al delincuente en pleno robo y solamente se llevó un control del portón de su vivienda.
El mismo día, un hombre de 35 años denunció en la seccional Cuarta que le robaron de su camioneta 100 mil pesos y un teléfono celular iPhone. El vehículo estaba estacionado sobre las avenidas Roque Sáenz Peña y Mitre y en los tres casos, la policía determinó que utilizaron inhibidor de señal que además de abrir los vehículos sin que se accione la alarma, daña el sistema de cierre centralizado. Durante la jornada de ayer ambos sospechosos designaron abogados y se abstuvieron de declarar ante el juez Mattos, tras lo cual fueron imputados por “hurto agravado” y continuarán tras las rejas.