La imagen impacta por su crudeza. A metros de los restos de una vaca faenada durante la noche y en pleno campo del norte provincial, se encontraba un novillo que con solo verlo se podía suponer que jamás había llegado a conocer la luz.
“Fue en Nueve de Julio hace una semana y media. Se trató de un caso de abigeato doble porque la vaca estaba preñada. Se mató a la madre y dejaron al feto terrible porque todavía no había nacido”, explicó el vocero de los productores autoconvocados del norte misionero Sergio Delapierre.
Sin soluciones
Casi en un tono de resignación, el productor yerbatero indicó que los casos de inseguridad rural no cesan en la provincia y reveló que los productores ya no quieren hacer las denuncias porque “saben que no va a pasar nada y es solo una pérdida de tiempo”.
“Un colono de la zona de Colonia Mado me contó que le entraron a robar a su chacra plantas de paraísos y después apareció en su casa una persona queriéndole vender esa madera que le había robado. Hizo la denuncia, pero el colono no pudo llevar abogado por una cuestión económica a la hora de declarar y el delincuente si lo hizo. Es todo una locura”, relató Delapierre.
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN, reconoció que el delito rural es difícil de comprobar una vez que se perpetra y por eso hizo énfasis en que hay que trabajar en su prevención. Para eso mencionó que es necesario mayor inversión y modificar el código penal, el de procedimientos de la Nación y endurecer las penas con “leyes más severas para el que delinque”.
“El Estado no puede quedarse callado y no hacer nada. Hay que cambiar las leyes. Yo creo que el responsable es el Poder Legislativo, tanto de la Nación como de la Provincia. Si no modifican la normativa, no se puede hacer nada”, añadió.
Casos que crecen
Si bien dijo que mermó el robo de yerba porque “la hoja verde no vale nada”, sostuvo que recibe cientos de denuncias de robos de herramientas en la chacra como ser motosierras, desmalezadoras, cables, etc.
Indicó que se observaron una caída del delito en el sector donde están los destacamentos de delitos rurales, pero aclaró que alcanza solo a una parte geográfica mínima. También agregó que estas unidades carecen de los recursos y la infraestructura suficiente para combatir los robos.
“Tenemos el problema que las unidades de delitos rurales tienen coches que no están en condiciones, no poseen el suficiente combustible entre otro montón de problemas”, acotó.
“No estamos seguros”
En ese contexto, Delapierre enfatizó que “el productor no está seguro en su chacra. Mientras no cambien las leyes, el productor jamás va a poder sentirse seguro”, reiteró el exintegrante del directorio del Instituto Nacional de la Yerba Mate.
Estadísticas oficiales
En abril de este año la Policía de Misiones, que depende del Ministerio de Gobierno, emitió un comunicado para anunciar que los delitos rurales en la zona norte y centro de la provincia se redujeron en un 50% respecto al primer cuatrimestre del 2022.
Dividiendo por delito, el texto oficial sostenía que el hurto de ganado se retrotrajo un 90%, el de hoja verde un 67%, el apego ilegal de madera 25%, los delitos que atentan contra la propiedad un 30%.
“En relación al delito de contrabando, las autoridades están trabajando en articulación con las fuerzas federales, y hasta el momento han interceptado cargas de granos que ingresan irregularmente a la provincia o bien desvían su punto de destino. En este mismo contexto, las intervenciones del operativo territorial lograron detectar contrabando de cigarrillos, combustible y también los agentes incautaron estupefacientes”, concluía el comunicado.
No obstante, Delapierre desacreditó las estadísticas oficiales y, por lo contrario, manifestó que no reflejan lo que está ocurriendo. “Eso es una contabilidad de lo que está registrado. Pero la mayoría decide no denunciar. Todos los dirigentes de productores saben que están robando por todos lados, eso es así”, refutó.
Siguiendo con esa línea, ejemplificó que si una persona sale de su casa y no deja nadie en su chacra, seguramente a la vuelta encontrará que le robaron algo. Asimismo contó acerca de la “modalidad de robo sorpresa” que viene creciendo.
“Es el hombre que va en su camioneta con la motosierra, la desmalezadora y la pulverizadora para trabajar todo el día. Lo deja atrás del vehículo, empieza con sus tareas, se aleja del coche y personas que están escondidas en las malezas le roban algunas de las herramientas del vehículo. Es una modalidad que se ve mucho en espacios que están cercas de lugares poblados.”, narró.
“No hay recursos”
Acerca del trabajo con el Ministerio de Gobierno, apuntó que “autoconvocados siempre se prestó para lograr acuerdos y eso siempre se mantiene. Fue una orden del Gobernador y no vamos a cambiar”, remarcó.
Aún así, consideró que la cartera que conduce, Marcelo Pérez, “no tiene recursos para mejorar” y lo argumentó con los últimos episodios que ocurrieron.
“Eldorado recibió cuatro agentes hace pocos días, cuando según los cálculos de los foros de seguridad necesitábamos 50 personas para equipar las unidades”, confirmó.
Luego, aclaró: “Nosotros entendemos que no hay recursos y no queremos culpar a nadie. Pero si vamos a la realidad, se está castigando mucho a la gente del interior”.
Por último, consideró que es necesario trabajar en “un programa de cambio en las inversiones en seguridad.
Una vez en el Ministerio de Gobierno nos prometieron tres cámaras como prototipo para vigilancia en el interior. Pero después pasó que no había esas cámaras y quedó así. Nosotros nos quedamos en el molde porque nos sometemos a la realidad”, concluyó el referente de los productores autoconvocados.