El poder adquisitivo volverá a caer este año pero sin embargo, un sector del país se encuentra ante una “burbuja de bienestar” que impulsa el consumo, en especial de los bienes percibidos como “dólares”.
Así, en los supermercados, la venta de whisky aumenta al ritmo del 20%, mientras que Luis Miguel agota funciones en el Movistar Arena y Taylor Swift hace lo propio en el Más Monumental de River.
El consumo, en tanto, estaría a la baja entre 1 y 3% este año, según las estimaciones de la consultora Scentia. Para el próximo hay optimismo pero no se prevé que el consumo “explote”, según detallaron especialistas en el marco del Retail Day, organizado por Retail publishing.
El término de “burbuja de bienestar” es de Guillermo Olivetto, de la consultora W, para explicar el fenómeno de consumo que se ve impulsado por dos factores: exceso de pesos y la pospandemia. “Nos pasamos dos años temiendo lo peor, que es la muerte”, señala para explicar por qué viajes, restaurantes y cines están con récord de visitantes.
Se trata de un año electoral donde además, hay inestabilidad política.
Olivetto reconoce, sin embargo, que hay dos partes en la Argentina. Del otro lado están los trabajadores del sector informal, que perdieron 11 puntos de poder adquisitivo y que no llegan a completar la canasta básica.
“Gastadores”
Para entender el país hay que reconocer esa ambigüedad, enfatiza.
“Los datos de la última década, sin embargo, muestran una caída del consumo de 10 puntos, aunque la gente está más gastadora que antes”.
Pese a la dualidad argentina, el dato más relevante a favor del Gobierno es el 6,3% de desempleo, que es históricamente bajo.
Para eso, el oficialismo apunta a sostener el nivel de actividad, aunque los pronósticos para este año son recesivos, aseguran.
El especialista en mercados Claudio Zuchovicki planteó en la apertura del Retail Day que la Argentina tiene oportunidades para adelante, con la expectativa de que el año que viene haya hasta US$ 40.000 millones más por cosecha y energía que este año. En los meses venideros, en tanto, se empezará a registrar la caída de los indicadores que, hasta ahora, son positivos.
Necesidades
Para el año electoral, “el Gobierno va a tratar de cubrir lo grueso: que no aumenten el desempleo y la inflación”, dice Olivetto.
“El proceso electoral tiene un altísimo nivel de incertidumbre por delante y una sociedad con alto nivel de emocionalidad”, advierte, sin embargo.
La otra brecha
La inflación sigue siendo el gran problema para el consumo y está generando distorsiones entre los canales. La brecha entre supermercados y autoservicios “chinos” es del 30% para los precios, según los datos de Scentia.
En ese sentido, Osvaldo del Rio, director de la consultora, señala que los supermercados capitalizan la caída del resto de los canales por la diferencia de precio. Y en ese sentido, indica que Precios Justos sigue siendo un programa que funciona en términos de traccionar consumo.
“El problema es que a la larga no es sustentable”, agrega el titular de Scentia que señala que el aumento de los productos del programa alcanza el 20% mientras que la inflación está por arriba del 110%.
Fiebre por las entradas para los shows
Desde que Taylor Swift anunció que “The Eras Tour” llega al país, las fanáticas se desviven por tener su entrada para ver a la cantante el 9 y 10 de noviembre de este año en el estadio Más Monumental.
Para muestra basta un botón: cuando se llevó a cabo la preventa exclusiva para clientes del Banco Patagonia, en la primera semana de junio, se agotó en menos de una hora y media.
Las entradas van desde $16.000 (con visión restringida) hasta $75.000 -o US$152 con el tipo de cambio blue-, siempre más cargo de servicio.
La revolución que provocó la llegada del imponente tour a Latinoamérica despertó la sorpresa de las fanáticas internacionales, quienes cuestionaron la diferencia abismal de precios entre su país y la Argentina.
En ese sentido, muchas seguidoras de la cantante están barajando la posibilidad de viajar a México o a la Argentina para ver a la cantante. El costo acá para ellos es mucho más bajo en relación con el precio de una entrada de reventa en Estados Unidos.
Según consignó Bloomberg, los precios para los conciertos de este fin de semana en Chicago superan los US$700 en el mercado paralelo.
Incluso, en otras zonas, las entradas que originalmente se vendieron por solo US$49 más impuestos, se están vendiendo a más de US$1500 en la reventa.
En tanto, el vuelo más barato de Chicago a Buenos Aires en noviembre tiene un precio actual de US$911.
Los shows en River de Taylor Swift también se podrán disfrutar con paquetes VIP que cuestan desde $67.500 hasta $155.000.
Taylor Swift anunció por primera vez su gira por Latinoamérica, aunque solo visitara tres países, México, Argentina y Brasil, lo cual hizo que millones de fanáticas de los países vecinos sacaron entradas en la Argentina.
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