Desde hace algunos años la cría de la raza Santa Inés, en pastos nativos de Misiones, impone su supremacía frente a otras razas por sus ventajas: la tasa de mortalidad en la fase del destete es mínima y el carnero adulto puede llegar rápidamente a la marca de los 85 kilos e incluso en muchos casos llegan a los 100.
“Además presenta bajo contenido en grasa y su piel es de altísima calidad. Es rústica y precoz, adaptable a cualquier sistema de cría y es de excelente desempeño en la parte cárnica y con excelentes cualidades maternales que permite obtener animales para sacrificio con una terneza extraordinaria”, explicó a ECO&AGRO, Alexis Ferrer, un criador venezolano afincado en Misiones, excampeón productor y expositor en su país natal.
Actualmente trabaja en el establecimiento “Doña Amelia”, cuyo propietario es Néstor Ortega, un ex ministro del Agro de la tierra colorada y quien en su actividad privada se dedica, hace tiempo, a la cría de ganado vacuno y ovino.
“La raza Santa Inés criada en pastos nativos puede llegar a los 360 días con 38 kilos. Las medias de los corderos llegan a 3,5 kilos en el nacimiento, 19 kilos a los 112 días (destete) y 25 kilos a los 196 días de edad”, comparó Ferrer al referirse al excelente desempeño de estos corderos.
“Nosotros recientemente conformamos a nivel nacional, la Asociación Nacional de Criadores de Santa Inés no entre las cuales hay varios miembros acá en Misiones. Entre esos establecimientos, el Doña Amelia es el que nos representa en este momento”, prosiguió.
Y resaltó: “Realmente siempre nuestros animales han tenido muy buena aceptación entre las estancias y además siempre se han vendido bastante bien.”
Condiciones óptimas
“Misiones tiene todas las condiciones para que esto se dé. Aunado a esto tenemos yerbales y algunos cultivos como pinos y eucaliptos que son forestaciones donde se están usando estos animales para minimizar los problemas de malezas. Ocurre que lo que para algunos es maleza, para las Santa Inés es su alimento”, prosiguió explicando el criador.
“Hay que tener en cuenta que cuando esté en plena vigencia la ley anti glifosato y otros herbicidas parecidos, que se van a prohibir, la cría de este tipo animal se va a convertir en una alternativa para lo que es la limpieza de los cultivos, que es algo completamente ecológico, con la ventaja de que también permite otra entrada económica con la venta de su carne”.
“El cordero Santa Inés es un animal que no desarrolla lana, que no amerita esquirla como lo vemos en toda su cría”, continuó destacando Ferrer, orgulloso de su producto.
Y agregó: “Esto lo convierte en un animal que cuando nace tiene una especie de pequeña anilla encima, que es para protegerse él con el frío pero, a medida que él crece eso desaparece de abajo hacia arriba y delante hacia atrás, quedando la última porción en la cadera alrededor de los siete meses. Luego esto desaparece por completo y todo lo que rinde es pura carne”, finalizó.