Teniendo en cuenta que es un cachorro y que debe disfrutar de las primeras etapas de su desarrollo, adiestrar al cachorro en obediencia significa incorporar no solamente normas básicas para lograr una buena convivencia sino también juegos educativos que lo ayudarán a desarrollarse.
La obediencia canina se trata de adiestrar a tu cachorro para que realice un ejercicio a la orden correspondiente. Suele confundirse obediencia canina con adiestramiento ya que la primera es la forma más común de adiestramiento. No son sinónimos, la obediencia es una parte del adiestramiento.
Algunos de los ejercicios de obediencia más comunes son: sentado, acostado, acudir al llamado y caminar sin tirar de la correa.
El adiestramiento en obediencia tendrá diferentes exigencias según lo que quieras lograr. Será diferente si se entrenan perros de trabajo, para búsqueda y rescate, o si se entrenan perros deportivos. El entrenamiento será más diferente aun si se entrenan perros de compañía ya que muchos de los ejercicios en perros deportivos y de trabajo no serán de utilidad en la vida cotidiana de un perro de compañía.
Entonces, lo primero es tener muy claro el objetivo. Si tu perro es de compañía, tus prioridades serán los ejercicios comunes de obediencia básica. Enseñarle a sentarse y acostarse a la orden, venir cuando lo llamas y a quedarse quieto. Otros ejercicios, como el caminar en “Junto” que es muy vistoso e impresionante, será inútil en la vida cotidiana. Es más práctico que tu perro aprenda a caminar sin tirar de la correa.