Posadas cuenta desde hace tiempo con diversos espacios de Mediación Comunitaria distribuidos a lo largo de distintos barrios, los cuales tienen como fin intervenir en las disputas vecinales con el fin de mejorar la convivencia ciudadana, sin tener que llegar a la vía judicial.
“Nuestra idea es que el ciudadano de Posadas no tenga que poner en marcha al Poder Judicial para resolver sus conflictos“, indicó la doctora Valeria Fiore, directora de Capacitación y Centros de Mediación Comunitaria y Acceso a la Justicia de la capital misionera.
La también candidata a Defensora del Pueblo de Posadas por la renovación, pasó este jueves por el estudio de FM 89.3 Santa María de las Misiones, la radio de PRIMERA EDICIÓN, donde explicó cómo funciona este espacio tan útil para alcanzar una feliz convivencia en la ciudad. “La mediación brinda este espacio para empezar a desenredar los conflictos y para comprender al otro, porque en definitiva cuando estamos enojados es porque hay algo que no comprendemos, y cuando comprendemos bajamos y podemos escuchar“, destacó.
“Para eso sirve la mediación, para que estas personas tan enojadas por la emocionalidad del conflicto, puedan tener este espacio de escucha, de construcción de estos conflictos, y poder mirar de otra manera, para acercarse a una solución“, agregó.
La abogada y mediadora destacó que actualmente en Posadas existen 13 Centros de Mediación, uno en cada delegación municipal, además de los ubicados en los Centros de Atención al Vecino (CAVs) y la oficina central en el municipio. Cualquier ciudadano puede ir de manera presencial a alguno de los centros y solicitar el servicio de forma gratuita. “Nosotros brindamos tres servicios, no solo la mesa de diálogo. Cuando hay personas que en principio no quieren mediar, se le ofrece una orientación legal primaria, se los orienta en cuanto trámites y demás; y también contención psicosocial para aquellas cuestiones que vienen atravesadas por violencias o por consumos problemáticos que no son mediables en principio“.
“El equipo interdisciplinario con el que trabajamos escucha y orienta a la persona en cuál de estos tres procesos participar, y a partir de ahí se empieza a armar la agenda para esta reunión de mediación“, continuó.
De la misma manera, se puede acceder a este servicio de manera online a través de un formulario disponible en cada una de las redes sociales de Mediación Posadas, “entonces completan un formulario muy sencillo, donde se piden los datos para ubicar en qué barrio está la persona, y el equipo más cercano se pone en contacto para ver qué le sucede“.
Fiore comentó además que en cada caso intentan realizar las invitaciones al diálogo a las otras partes de forma personal, “para explicarle a la persona de qué se trata, que no es algo adversarial, que es simplemente un espacio de oportunidad para dialogar, y para que esa persona pueda decir todo lo que tiene que decir acerca del conflicto”
“Muchas veces cuando las partes se escuchan a sí mismas ya llegan al primer encuentro y solucionan. También tenemos pilas de vecinos que llegan y te dicen ‘con ese no se puede hablar’, ‘yo con él no me voy a sentar’, y terminan saliendo de la mano, abrazados“, destacó.
Para Fiore, la clave en la mediación de conflictos está en la escucha y la flexibilidad. “Uno tiene que tener la flexibilidad para poder correrse de los propios posicionamientos, ruidos internos y demás, y abrirse a lo que éste otro trae. Hay que poder correrse y escuchar al otro como un legítimo par, porque si yo no puedo escuchar desde ahí al otro, difícilmente pueda ayudarlo con lo que le sucede“.
Por último, celebró que en más del 75% de las mediaciones se llega a un acuerdo favorable, pero que, más importante aún, “de esa cifra, en más de un 80% de las veces se cumplen los acuerdos, con lo cual te da la pauta que el conflicto se resolvió bien“.
“Nosotros hacemos un seguimiento por unos meses y tenemos muy alto índice de cumplimiento de acuerdo, lo que nos deja muy satisfechos“, indicó.
Por otra parte, también han afrontado casos en los que no han podido llegar a buen puerto. “La realidad que hay personas que se tienen que mudar por un vecino conflictito, es terrible”
“Hasta hace ocho años, el vecino que tenía un conflicto iba a la Policía a denunciar, y esto hacía que el conflicto escalara, entonces muchas veces nos encontramos con historias de 10 o 12 años. Que el vecino aprenda a dialogar y a gestionar hace a la calidad de vida“, cerró.