¿Queremos un jardín repleto de flores? ¿Aromas bellos y colores vibrantes, con los frutos más hermosos y los verdes más variados?
Para poder cuidar algo debemos conocerlo, observarlo y respetarlo. Del mismo modo que una mirada más sincera y amorosa hacia aquello que vamos atravesando nos hace más conscientes de cada una de las decisiones que tomamos.
No se trata de desconectar sino de conectar profundamente con quienes somos, con aquello que sentimos y con cada proceso recorrido. Cuidar nuestro bienestar emocional es cuidar nuestra salud. Al entender que somos un todo, que donde estemos necesitamos cuidar nuestro cuerpo, nuestra mente y las emociones para sentirnos estables y equilibrados.
Tener conciencia de nuestro sentir
Sé consciente de tus emociones y reacciones, observando cuáles situaciones te ponen triste o enojado e intenta abordar y cambiar esa manera de reaccionar.
Aprender a expresar cómo nos sentimos
La palabra, el acto de decir es liberador y es el inicio de ir sanando.
Tener espacios de reflexión
Ubica un espacio en el día, te sugerimos que lo uses a primera hora de la mañana, para que puedas pensar en aquellas situaciones que no te permiten mantener la calma.
Buscar herramientas para el manejo del estrés
Sería casi imposible vivir sin estrés, pero sí podemos -por medio de la actividad física, la meditación o de distintos ejercicios de respiración- lograr efectos positivos en nuestra cotidianeidad.
Gestionar espacios que nos conecten con el disfrute
Con tantos compromisos y obligaciones, dejamos para después aquellos momentos que nos conectan con el placer, siendo importantes y fundamentales.
Practicar el autocuidado
Teniendo en cuenta la importancia de la actividad física y de una alimentación consciente, entre otras cosas.
Tener un propósito
Gestar proyectos, sentirnos útiles. No autolimitarse ni cerrarse a nuevos desafíos.
Tener amigos, personas afines con quienes compartir
Tener una mente positiva y flexible, que nos permita aceptar la diversidad de situaciones que nos plantea la vida es sin duda el camino para transitar la vida con una mochila más liviana.