Culminando nuestra lectura vacacional de las Reflexiones sobre la No Violencia del Mahatma Gandhi, resumimos sus expresiones finales: “Al admirar lo maravilloso de una puesta de sol o la luminosa belleza de la luna, mi alma se expande en la adoración al Creador. Trato de discernirlo con su perfección en todas sus criaturas. Todo lo que impide que el alma alce vuelo es ilusión, trampa. Dios es la potencia misma, la esencia de la vida, la conciencia pura e inalterable, es eterno.”
“Nuestra finalidad suprema es discernir a Dios: todas las actividades políticas, sociales y religiosas deben tender a este fin. Concretamente, es preciso consagrarse al servicio de los demás, pues el medio para hallar a Dios es salir a su encuentro en su Creación y ser con ella una sola cosa.”
Coincidentemente, el maestro y poeta (Premio Nobel 1913) Rabindranath Tagore nos explicaba que la palabra sadhana es una voz sánscrita que designa toda disciplina para progresar en el sendero hacia Dios, el camino espiritual, como tituló a una de sus obras que originalmente reunió pláticas dirigidas a sus discípulos.
En ella hizo referencia a los sabios que vivían en los bosques con el propósito de realizar la armonía entre el espíritu humano y el del Universo, debido a que en la vida de ciudad la persona dirige la visión mental a sus actividades y necesidades, de lo que resulta una disociación artificial entre la persona y la naturaleza universal a cuyo seno pertenece.
También nos recordaba que las antiguas tradiciones insistían en la armonía que existe entre lo individual y lo universal, agregando que la unidad fundamental de la Creación no es una mera especulación filosófica, porque el objetivo mismo de la vida consiste en realizar esta vasta armonía dentro del sentimiento y la acción. De este modo, con la meditación y el espíritu de ofrenda cultivamos la conciencia y todo adquiere un significado espiritual, con un vasto sentimiento de dicha y paz. Entonces, no es únicamente cuestión de conocimiento, como lo es la ciencia, sino que es una percepción del alma por el alma, que no nos confiere un poder, como ocurre con el conocimiento, pero nos procura la alegría de la unión con lo que es semejante.
Y aquí nos permitimos recordar que el significado de la palabra Yoga es unión. Namasté.