Tras las vacaciones y el inicio de un nuevo año, volvieron los movimientos alrededor del sillón presidencial de la Liga Posadeña de Fútbol (LPF). Es que luego de aquel inicio de asamblea frustrado, se avecina la nueva temporada y la cuenta regresiva ya comenzó en busca del nuevo mandatario de la entidad.
Para entender las novedades, vale primero recordar cómo comenzó la historia. La asamblea eleccionaria se inició el jueves 22 de diciembre de 2022 por la noche y con Ramón Arévalos como único candidato con “avales”, homologación que -se supo ese día- finalmente no estaba en regla.
Ante esa situación y, además, el pedido de impugnación de El Brete por inconsistencias en el balance presentado por la tesorería, los asambleístas finalmente acordaron llamar a un cuarto intermedio hasta el jueves 23 de marzo de 2023.
Sin embargo, las novedades podrían llegar mucho antes de esa fecha. Y es que, según pudo saber EL DEPORTIVO, el club Crucero del Norte tomó las riendas del asunto y convocó a los presidentes y delegados del resto de los clubes a una reunión en la sede céntrica del Club Mitre, sobre La Rioja y Jujuy, que se realizaría mañana por la noche.
¿Cuál será la principal temática del encuentro? El objetivo pasaría por aunar criterios y construir un candidato de consenso, por mayoría, para terminar de una vez por todas con las idas y vueltas alrededor del sillón de la calle Catamarca.
Al respecto, los trascendidos indican que la danza de nombres tiene hoy por hoy a tres potenciales interesados, Silvio Alvarenga (El Brete), Edgar Rocha (Deportivo Corpus) y Oscar Pelinski (expresidente de Huracán), aunque todo cambia minuto a minuto.
Así las cosas, la reunión prevista para mañana por la noche en el templo Auriazul podría zanjar las diferencias que, al menos hasta el momento, persisten en torno al próximo presidente, a sabiendas de que el actual titular, Nelson Castelli, no irá por la reelección y se mantiene en su cargo a raíz de una prórroga extraordinaria que se otorgó -justamente- por lo sucedido en diciembre último.
A la espera también de lo que disponga la Dirección de Personas Jurídicas respecto a aquella impugnación, el futuro de la Liga Posadeña permanece en vilo. Las próximas horas pueden ser claves.