Maris Esquivel es una experta en fuegos. Es quien entiende su accionar y quien nos ayuda a conectar con el poder transmutador que posee este poderoso elemento.
Llegan épocas de grandes desafíos, de grandes cierres y de un gran compromiso individual con uno mismo. En esta época, los portales con las divinidades, con los seres de luz, con guías y maestros nos ponen en un nivel energético de grandes desafíos.
En diálogo con Maris respecto a la participación de un ritual con el fuego nos explica que ella, antes de cada encuentro le pide a la persona que “reflexione sobre aquello que quiere quemar, eso que le cuesta como los pensamientos recurrentes, actitudes que son más fuertes que la voluntad de ir mejorando.
Quemar aquello que no puedo perdonar, quemar la no fuerza de voluntad para terminar las cosas”.
Otra cuestión para tener en cuenta es la de preparar, sutilizar, nuestro cuerpo “quemando lo denso para que las vibraciones y la energías más sutiles desciendan”.
También es anclar fuertemente las energías, en el corazón de cada uno, de cada hombre, cada mujer para que se fortalezca en nosotros la convicción de que un mundo mejor es posible.
Todo se logra a partir de la autocontemplación y la auto-observación.
Para Maris, “de nada vale bombardearnos con un sinnúmero de conocimientos, con talleres y un montón de actividades como leer libros, ver películas, si yo no hago diariamente esa introspección que me permita ver mis propias sombras”.
Al mirar mis sombras poder abrazarlas con amor y trabajarlas, “no vale de nada llenarme de conocimiento porque tiene que prevalecer la sabiduría que es el conocimiento llevado a la práctica”.
Aclara que este es un momento de transición, muy difícil en este tiempo que comenzó el 25 de septiembre y que continuará hasta el 25 de diciembre donde se abrieron portales de trascendencia y donde el ser humano es el que tiene que ascender.
Es que “las jerarquías celestiales y todas las energías que nos ayudan a trascender ya han bajado todo lo que pudieron. Por eso, mucha gente se siente un poco –energéticamente hablando- con algunos síntomas que les superan, pero es que las energías ya no pueden descender más, somos nosotros los que tenemos que ascender”. Es un trabajo que tenemos que hacer con “mucha sinceridad y mucho respeto hacia uno mismo y no ser hipócritas”.
Maris advierte que hoy el mundo está lleno de gente que se prepara para un montón de cosas, pero “está con un montón de síntomas y traumas. No salir para afuera, ir hacia adentro, encontrar al maestro, ese que está 24 horas dentro de ti y es el que te dirá: “No por ahí no, por acá”.
Lograr esa intimidad, “eso es el fuego; el fuego es transmutador, es alquímico, es capaz de transformar nuestras sombras en luces, nuestro barro en oro, nuestra imposibilidad de perdonar en liberación y reconciliación”.
Cuando se llevan a cabo los encuentros con el fuego siempre llegan las personas que tienen que hacerlo. Son atraídas por esa fuerza especial, por esa fuerza poderosa que luego transforma.
El miércoles 21 de diciembre, época en que se vivencia y siente el Ángel de la Navidad, a las 19 horas se hará un nuevo encuentro con el fuego en Ñasaindy, ese lugar que Maris tiene para recibir a quienes confían en que hay un mundo mejor por crear.
El intercambio será un Pan Dulce para compartir en merenderos a los ayuda Maris. (Consultas: solo mensajes 3764120222).