El tema de la inseguridad preocupa a los vecinos y comerciantes de las chacras 62, 63, 68 y 69 de la capital provincial, quienes aseguran que en los últimos meses aumentaron los casos de robos y arrebatos, tanto en las casas particulares como así también en los comercios y paradas de colectivos. Es por ello que hicieron público el planteamiento pidiendo un mayor control de las autoridades en toda la zona, cuya jurisdicción pertenece a la Seccional Segunda de Policía.
Según relataron a este Medio, “venimos con estos problemas desde hace ya un tiempo importante y sin solución porque si bien tuvimos reuniones con algunas autoridades policiales en su momento las mismas fueron cambiadas en sus funciones por la situación que trascendiera públicamente a principio de noviembre”.
Explicaron que “uno de los inconvenientes que venimos exponiendo ya en reiteradas ocasiones es que nos resulta hasta tragicómico que tengamos una comisaría tan cerca y que debamos vivir como si estuviéramos completamente desprotegidos porque los robos ocurren a cualquier hora del día”.
Aclararon que “no hacemos diferenciación como algunos con el propósito de minimizar la cuestión, porque cuando contamos que le roban la mochila al que pasa caminando, o el teléfono a quien está en una parada de colectivos, o entran a una casa cuando no hay nadie o bien están durmiendo y se llevan electrodomésticos y cosas pequeñas, para nosotros es un robo, porque nos están sacando algo que es nuestro y nos costó comprarlo, además de pasar ese mal momento que incluso le pasa a nuestros hijos”.
“Decimos esto porque nos piden que denunciemos pero cuando vamos y contamos lo que pasó en la Comisaría lo toman como que no es algo importante, es increíble la impotencia que nos genera a cada uno que pasamos por esta situación”.
En el mismo sentido, José Romero, quien ofició de vocero del grupo, apuntó que “encima uno cuando expone públicamente se enojan quienes tienen la responsabilidad de cuidarnos y hasta hay algunos vecinos que no dimensionan el tema porque todavía no les tocó a ellos”.
Crecimiento y seguridad
Romero agregó que “con las avenidas de manos únicas y las mejoras de asfaltado, que agradecemos, hizo que se instalen más negocios en la zona, que por un lado está bien pero que también ya fue detectado por los ‘amigos de lo ajeno’, de los oportunistas que siempre se dan cuenta primero que falta mayor presencia policial para acompañar ese crecimiento y no dejar desprotegidos a los vecinos y a los comerciantes”.
Otro de los vecinos remarcó que “el crecimiento y la seguridad deben ir de la mano sino los comercios que se instalaron se irán. Además, antes por el barrio pasaban pocas personas y uno enseguida notaba si tenían alguna actitud sospechosa pero como ahora hay más comercios, que lo festejamos, se vuelve más difícil controlar por nuestra cuenta sin ayuda de la policía, que debería tener mayor presencia, hacer más recorridas”.