En esta interminable carrera por ganarle a la inflación, para evitar que más y más argentinos caigan en la pobreza y la indigencia, el superministro de Economía, Desarrollo y Agricultura, Sergio Massa, anunció ayer nuevas medidas gubernamentales sin duda poco originales. ¿Pero resultarán efectivas?
La Casa Rosada las presentó como el “plan de estabilización”, término que marca la pendiente en la que se encuentra la economía del país con respecto a la hogareña, con salarios con creciente pérdida de poder adquisitivo y góndolas con subas de precios constantes.
El eje de sus declaraciones de ayer fue el congelamiento de precios por los próximos cuatro meses, basado en el objetivo (más bien el anhelo) que Massa remarcó: “que permita que la gente vaya al supermercado con cierta tranquilidad y seguridad”. Suena muy bueno pero, hoy ir a un supermercado no refleja esas sensaciones sin las actualizaciones salariales acordes a los tiempos.
Del lado empresario, como era de esperarse, hay dudas y reparos. De hecho, las hay desde hace varios días cuando la idea comenzó a esparcirse mediáticamente.
Entre los consumidores de Misiones, poco y nada se puede esperar si las medidas en cuanto a precios y promociones van a parar solamente a las grandes ciudades, mediante las grandes cadenas de hiper y mayoristas y el congelamiento sólo se siente por estos días por la ola polar que cayó sorpresivamente en primavera. Precios Cuidados, Precios Justos, Precios Máximos… ¿cuántos de estos han pasado sin pena ni gloria sin llegar a los 77 municipios misioneros por igual?
Habrá que estar atentos porque, sabiendo que se viene el congelamiento de Massa, lo más probable es que los empresarios de alimentos actualicen sus listas previamente. Semana caliente previo al presunto enfriamiento.