El pasado lunes, productores agropecuarios se reunieron en la localidad de San Pedro preocupados con el crecimiento de los delitos rurales. En la oportunidad señalaron que en los últimos días aumentó el robo de madera nativa en la zona de Colonia Delicia, Mado, Esperanza, Wanda, y solicitaron medidas que pongan freno a la inseguridad que vienen sufriendo. La problemática se suma al robo de yerba, cítricos y ganado que se reiteran en diversos puntos del territorio provincial.
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN, Sergio Delapierre, referente del grupo de Productores Autoconvocados, indicó que “está creciendo mucho el robo de madera nativa, y también se está viendo muy afectado por los delitos el sector del citrus. Es algo que no termina de solucionarse”.
“Se están dando muchos problemas con delincuentes que ingresan a pinales o reservas de monte nativo. Hay personas que tienen parcelas de monte nativo, lo cuidan con mucho orgullo porque es una defensa del medio ambiente y un reservorio de biodiversidad, y ahora entran estos delincuentes para sacar los mejores rollos provocando también un desastre en la naturaleza. Muchas empresas también tienen reservas de monte nativo”, advirtió.
Por ello, consideró que “falta más control para evitar los robos y suceden cosas muy extrañas, porque eso va todo a un aserradero y solamente hay un puñado de aserraderos, entonces vemos que no es algo tan difícil de controlar y evitar”.
Consultado por los reclamos que realizan al Gobierno, en la búsqueda de soluciones inmediatas, Delapierre opinó que “toda ayuda es necesaria, pero ya no sabemos a quién más pedir que nos ayuden”.
“Ahora pasa que la policía rural está más en la zona de Eldorado, Nueve de Julio y Montecarlo. Por eso, lo que estamos pidiendo ahora es un nuevo destacamento que se ubique en el pueblo de Mado, porque ahí estamos teniendo los problemas ahora”, describió y amplió: “Si ponemos un destacamento en Mado tendremos la posibilidad de que con un vehículo adecuado se llegue rápidamente a los puntos donde están actuando los delincuentes. El pedido de Productores Autoconvocados es que se vaya armando ese nuevo destacamento de policía rural”.
En la misma línea contó que “en las zonas donde ya se instalaron destacamentos de policía rural disminuyó un poco el robo de yerba y abigeato, por ejemplo, porque es más riesgoso para el delincuente circular con una vaca trozada en un vehículo y ser descubierto por un operativo”.
Por su parte, Ricardo Ranger, productor citrícola de la zona norte provincial, afectado por la situación señaló a este Diario que “nosotros tenemos monte nativo hace 55 años y hace poco me robaron madera por primera vez. En la zona de Mado y Delicia es impresionante como crece el robo de madera, tanto de la nativa como del implantado”.
“Los productores nos mantenemos unidos para estar comunicados, pero falta más policía porque son pocos agentes en la zona, y también más ayuda del Gobierno. Es problemático el robo de madera que estamos sufriendo ahora”, cuestionó.
Además, subrayó que “a mí me roban mucha fruta cítrica desde una comunidad de aborígenes, que después venden en otro lugar. Esto viene pasando hace tiempo, y ahora estamos presionando al Gobierno para que trate de solucionarlo, pero todavía no tenemos respuestas a los pedidos”.
En relación a la actividad citrícola relató, de modo general, que “estamos sobreviviendo como se puede. Los que hacemos cítricos no tenemos ningún apoyo del Gobierno”.
“Hay muchos problemas por la falta de mano de obra, no se consigue gente para trabajar. También con el aumento en los costos de producción, y es impresionante la cantidad de fruta de la competencia que viene de Entre Ríos”, apuntó y cerró diciendo que “por eso nadie más está plantando cítricos en la provincia. La citricultura en Misiones está en extinción”.