Partiendo de la idea que nuestra calidad de vida es influenciada en gran parte por la calidad de nuestra comunicación, hoy quiero compartirles la metáfora de la jirafa y el chacal que usa la Comunicación No Violenta -CNV- para que resonemos.
La jirafa representa la conciencia, tiene un corazón que puede pesar más de 10 kilos, que nos recuerda el valor de un gran corazón para abrirnos a la conexión con la vida.
También posee un cuello que puede medir hasta 2 metros que le permite ver más allá y nos recuerda la importancia de tener una visión amplia para visibilizar las consecuencias de nuestra forma de actuar y relacionarnos en el largo plazo. Su lengua es tan fuerte que puede deshacer espinas. Esto nos lleva a la importancia de escuchar las necesidades, más allá de las espinas con las que a veces nos expresamos, tales como juicios, quejas o exigencias. Además, su lengua es tan larga que le alcanza para limpiarse los oídos, clave para escuchar mejor lo que es importante para la otra persona, sin interpretarla bajo nuestros propios filtros.
El segundo animal que se usa en la CNV como metáfora es el chacal. Simboliza el lenguaje de la desconexión, el que está basado en el juicio, la culpa, la crítica, los juicios moralistas, la descalificación, las exigencias, las quejas, entre otras expresiones cotidianas de la cultura de la violencia.
Entre sus características encontramos que el chacal camina con la mirada hacia el piso, significando que está más interesado en satisfacerse en el momento, que en considerar las consecuencias de sus acciones a largo plazo. Se reproduce durante todo el año como la cultura de la violencia. Es territorial, delimita su espacio con olores para que nadie entre, está a la defensiva, percibe al otro como un intruso y representa la cultura de la dominación.
La integración de la CNV no consiste en negar o rechazar a tu chacal, de hecho, mientras más lo hagas, más fuerte y feroz será su aullido. Consiste en hacerlo consciente para recuperar la capacidad de elegir cómo relacionarnos, poner límites amorosos y disolver cualquier identidad basada en la cultura de la dominación.
Busca otras jirafas para cultivar esta conciencia y así expandirla, esas personas que compartan estas ganas de vivir y comunicarse de una manera que genere conexión, cuidando las necesidades de la vida.