Más de 500 organizaciones sociales y ambientales se movilizan en el país por la implementación de la Ley de Humedales, que comienza a tratarse en sesión especial este jueves en Cámara de Diputados.
Durante este sábado y domingo, en más de 20 provincias se manifestaron en el marco de la Acción Plurinacional por los Humedales, con el objetivo de pedir protección efectiva a estos ecosistemas que, a más de 10 años de que se presentara el proyecto de ley, siguen sin una legislación que los proteja.
El epicentro de la movilización fue Rosario, afectada por el humo de las quemas en el Delta del Paraná, en forma casi permanente. Allí se llevó a cabo una marcha multitudinaria y corte en el puente.
Desde Ushuaia a La Quiaca se despliegan marchas, pintadas, talleres, carteles y protestas, unificadas en el reclamo. En Buenos Aires, activistas de Greenpeace se acercaron hasta el Congreso Nacional para llevar hasta el parlamento el humo que padecen desde hace meses los habitantes del Delta.
En este marco, la Cámara de Diputados comienza con el debate en plenario de comisiones para busca la sanción de la ley. La sesión especial -se anunció- será este próximo jueves.
“Nuestros humedales se encuentran en estado de emergencia. Necesitamos que el Congreso Nacional esté a la altura de la crisis ecológica y climática que atravesamos, y que se reconozca el reclamo ciudadano por una Ley de Humedales, que lleva más de 10 años” afirmó Leonel Mingo, de la campaña de humedales de Greenpeace, en consonancia con los reclamos de las organizaciones.
Biodiversidad destruida
Los humedales abarcan más del 21% del territorio nacional y tienen un enorme valor biológico, social, cultural y económico; se estima que el 40% de la biodiversidad mundial vive o se reproduce en ellos.
Las diversas actividades de este fin de semana reclamaron protección de humedales frente al avance de los sectores agroindustriales, mineros e inmobiliarios y la falta de control que los destruyen, y rechazan el proyecto de ley acordado por los ministerios de Ambiente de las provincias.
“Es necesario que incluya un relevamiento exhaustivo de cuántos son y en qué estado están los humedales de nuestro país, una moratoria, para frenar inmediatamente los fuegos, hasta que se termine el relevamiento y que se incorpore la figura de delito penal para quien los destruya”, exhortaron desde Greenpeace.