Momentos de mucha bronca vivió ayer un conductor que terminó con su automóvil incrustado en una boca de tormenta que no tenía la correspondiente rejilla protectora en la esquina de Jorge Newbery y Tomás Guido, en el barrio Alta Gracia de Posadas. No hubo heridos, porque en el lugar se transita a muy baja velocidad, pero la falta de señalización sorprendió al hombre.
Se trata de una esquina cuyo deterioro los vecinos ya venían advirtiendo, que luego de ser asfaltado “quedó con la misma rejilla que tenía anteriormente y que estaba toda doblada debido a que por el lugar en su momento, años atrás, transitaban vehículos de carga y otros de gran porte”, explicó uno de los vecinos a PRIMERA EDICIÓN.
Agregó que “hace meses que se viene pidiendo que solucionen ese tema, como así también del alumbrado público. Se mejoró lo último pero hay árboles que en ese lugar, precisamente, no dejan que la luz llegue bien a la calle donde está esa boca de tormenta que, encima, está en un desnivel que cuesta detectar para los conductores hasta a plena luz del día”.
El auto en cuestión ingresó por Tomás Guido y avanzó unos metros, “nosotros como vecinos pasamos todos los días por allí y sabemos que hay que correrse bien a un costado para que, precisamente, no nos pase lo que le ocurrió a este conductor que después tuvo que llamar al auxilio mecánico para poder retirar su vehículo que se clavó de punta y no había posibilidad de quitarlo de esa posición muy incómoda” .