Legalmente el uso del barbijo que se instaló como obligatorio con el inicio de la pandemia de COVID-19, tanto en Misiones como en el resto del país, dejó de tener ese estatus. Después de más de dos años de convivir con uno de los virus que más daños y víctimas produjo en Argentina, se puede pensar que los argentinos en general hemos aprendido a sostener las medidas preventivas, sin necesidad de que nos amenacen con sanciones si no las implementamos.
En esta nueva etapa en la que se inserta Misiones, dentro del grupo de provincias que ha dejado la emergencia epidemiológica y sanitaria -al menos hasta que no se produzcan hechos similares como los vividos desde 2020 hasta el presente- hay que apostar más que nunca por la responsabilidad social de los ciudadanos.
De ello dependerá que la transmisión del COVID-19 o las influenzas y otros virus respiratorios que pueden dejarnos más víctimas mortales, no impacten de manera tan drástica en la población.
En especial, sobre un sistema sanitario que ha dado todo para pasar las etapas más críticas, con alto porcentaje de camas de Terapia Intensiva ocupado, con médicos y enfermeros sin horarios. Personas, seres humanos a los que debemos ayudar a no volver a vivir esos tiempos tan complejos.
Por esa responsabilidad que parte desde lo personal y luego por el núcleo familiar, es que habrá que seguir analizando si encerrarse en un salón o habitación con muchas personas, no necesita de un barbijo o tapabocas. Y sea voluntario tomar la decisión de ponérselo para cuidado propio y grupal.
Paralelamente, se sigue recomendando el uso de alcohol en gel por el contacto de manos en superficies o con otras personas al saludarse; y el lavado de manos frecuente.
Mientras logremos mayoritariamente sostener algunas medidas de estas, seguramente la vida en sociedad seguirá por los carriles normales y no habrá que volver a 2020, donde la pandemia nos sorprendió y dejó muchas secuelas (sociales, educativas, económicas, laborales, sanitarias).
Finalmente, abogar porque la Provincia clarifica prontamente qué hacer en las escuelas, antes del lunes 25 de julio cuando se retomen las clases presenciales en todos los niveles y establecimientos educativos de la tierra colorada.