El mundo está tan lleno de opiniones como lo está de personas y usted sabe que es una opinión, uno dice esto y algún otro dice aquello, cada cual tiene una opinión, pero la opinión no es la verdad, por lo tanto, no escuche una mera opinión, no importa de quien sea sino descubra por si mismo qué es lo verdadero.
“La opinión puede cambiar de la noche a la mañana, pero no podemos cambiar la verdad”, Jiddy Krishnamurti.
Busqué en el diccionario qué es la verdad y encontré: Conformidad entre lo que una persona manifiesta y lo que ha experimentado, piensa y siente.
Pensemos ¿qué es verdad para nosotros ? ¿Quién lo dijo? O ¿qué nos decimos nosotros?
¿Por qué a veces queremos discutir por una verdad? Cuando lo que cuenta es que esa verdad nos la digamos a nosotros mismos.
Muchas veces nos cuesta aceptar una verdad porque no la queremos ver o no podemos, y tenemos que entendernos. No siempre se puede.
Leyendo la frase con la que empecé la nota pude comprender qué diferente es una opinión a la verdad, una opinión está cargada por las experiencias que hemos vivido en nuestra vida por ejemplo, para alguien que corre y está entrenado puede decir que correr es fácil sin embargo, alguien que no la haga, dirá que es difícil. Así podemos comprender cómo las opiniones son eso: OPINIONES.
En cambio la verdad es otra cosa, como la palabra proviene del griego veritas, que significa verdadero, podemos decir que es la coherencia entre la realidad que vivimos y lo que hacemos.
Se dice que un conocimiento es verdadero cuando expresa las cosas tal como son en la realidad. Por tanto, la verdad no puede ser objeto de manipulación, no depende de los gustos o intereses: las cosas son como son, y nuestro conocimiento sólo es verdadero si se ajusta a la realidad.
Pensemos hoy ¿cómo vivimos nuestra vida ? ¿Estamos en coherencia entre lo que pensamos, decimos y hacemos? ¿Cómo definiríamos nuestra vida?
Les mando un abrazo y que Dios los bendiga.