Desde 1980, la atención que la comunidad internacional presta a la importancia de la familia ha crecido. La Asamblea General ha adoptado varias resoluciones y ha proclamado el Año Internacional de la Familia y el Día Internacional de las Familias.
Destacando el papel decisivo de los padres en la educación de los niños, el Día Mundial de las Madres y los Padres reconoce también que la familia tiene la responsabilidad principal en la alimentación y en la protección de los niños.
Para el pleno y armonioso desarrollo de su personalidad, los niños deben crecer en un ambiente familiar y en una atmósfera de felicidad, amor y comprensión.
La Asamblea General de la ONU, en su resolución A/RES/66/292 del 17 de septiembre de 2012, declaró el 1 de junio Día Mundial de las Madres y de los Padres, queriendo así reconocer su labor y honrar su trabajo en todo el mundo.
Como los anclajes de la familia y la base de nuestras comunidades y sociedades, los padres tienen la responsabilidad de proteger a sus familias de cualquier daño, cuidar a los niños que no asisten a la escuela y, al mismo tiempo, continuar con sus responsabilidades laborales.
Sin el apoyo de los padres, la salud, la educación y el bienestar emocional de los niños están en riesgo.
Al introducir políticas y prácticas laborales adecuadas para las familias, las empresas y organizaciones estarán en una mejor posición para promover la seguridad y el bienestar de los niños y brindar un apoyo sistemático a los empleados.
Antecedentes
Durante la década de 1980, las Naciones Unidas comenzaron a centrar su atención en los problemas relacionados con la familia.
En 1983, en base a las recomendaciones del Consejo Económico y Social, la Comisión para el Desarrollo Social en su resolución sobre el papel de la familia en el proceso de desarrollo (1983/23) solicitó al Secretario General que aumentara la conciencia entre los tomadores de decisiones y el público en general de los problemas y necesidades de la familia, así como de formas efectivas de satisfacer esas necesidades.
En su resolución 44/82, de 9 de diciembre de 1989, la Asamblea General proclamó 1994 como el Año Internacional de la Familia; y en la resolución 47/237 de 1993, la Asamblea General decidió que el 15 de mayo de cada año se celebrara el Día Internacional de las Familias.