Se confirmó en las últimas horas que la Justicia investiga la muerte de Lucas Rodríguez (22) como homicidio, tras el análisis y recopilación de evidencia que hizo el Juzgado de Instrucción 2 de Eldorado, a cargo de la jueza Nuria Allou.
Una de las pruebas fundamentales fue el resultado de una Junta Médica, que tal como publicó en exclusiva PRIMERA EDICIÓN, arrojó como resultado que el deceso del joven fue como consecuencia de “fractura de base de cráneo”.
Además los forenses hallaron la impronta de un “golpe en la frente” (entre ambas cejas). Estas dos lesiones fueron halladas recién en el segundo examen al cuerpo, ya que en la primera autopsia se determinó que su muerte fue por “sepsis o infección generalizada y meningitis bacteriana”.
El nombre de Lucas Rodríguez tuvo relevancia a nivel nacional cuando a finales de abril pasado su familia denunció que murió a raíz de una golpiza en la vía pública de Eldorado y que todo quedó registrado en un video que se hizo viral. Poco después se comprobó que la persona que salía en las imágenes recibiendo golpes era un joven de 18 años que sufrió lesiones leves y no se trataba de Lucas. Por ese hecho hubo tres detenidos que luego recuperaron la libertad.
Gracias a las averiguaciones de los últimos movimientos de Lucas se estableció que la última vez que lo vieron sano y salvo fue el lunes 18 de abril a las 6 cuando regresó a su vivienda de alquiler. Entre ese horario y el miércoles 20 de abril, en que lo hallaron agonizando en esa misma residencia, algo le hicieron y es lo que trata de determinar la Justicia.
Lucas, quien era oriundo de San Pedro, murió el domingo 24 de abril a las 13.30 en el SAMIC Eldorado.
Punto ciego de dos días
Para los investigadores será clave determinar qué sucedió desde la mañana del lunes 18 de abril, en la que Lucas pidió un certificado médico por 48 horas en un centro asistencial de su barrio porque se sentía con malestares, y el miércoles siguiente cuando lo hallaron agonizando en su vivienda del Kilómetro 4 de Eldorado.
Es que según testigos, tras una salida nocturna lo dejaron ese lunes a las 6 en buen estado de salud en su domicilio. Incluso dijo a sus amigos que se iba a tomar un café e iría a trabajar (lo hacía en un supermercado de la zona).
Para los pesquisas resulta poco probable que la víctima se generara por alguna caída accidental dentro de su casa las lesiones que hallaron en las autopsias. Aún es más poco probable que por algún desmayo se fracturara la base del cráneo y tuviera un golpe en la frente. Por si fuera poco, un reciente testimonio puso más misterio en torno al hecho y tiene que ver con un martillo.
Ese lunes al regresar a su domicilio el joven pidió prestada dicha herramienta a un vecino, porque se había olvidado las llaves y forzó el acceso a su propia residencia. Los próximos pasos de la Justicia serán citar a declarar a ese vecino y a los dos amigos con los que paseó el domingo a la noche y lunes a la madrugada, quienes fueron los últimos en ver a Lucas sin lesiones y bien de salud.