Gracias al libro Yerbal Viejo se sabe que el 9 de mayo de 1941, un vecino de Oberá llamado Diego Bravo organizó un encuentro de ajedrez en la Capital del Monte. Si bien no hay resultados de esa jornada, ese evento fue la piedra inaugural de la Asociación Civil Club Ajedrez Oberá que hoy cuenta con reconocimiento nacional e internacional y más de 70 jugadores federados. “Nuestro objetivo es abrir la puerta para que el ajedrez sea para todos”, dijo a EL DEPORTIVO su actual presidente, Enzo Oliveira.
Desde aquel primer encuentro, la reunión a jugar ajedrez comenzó a llamarse simplemente “Ajedrez Oberá” hasta que en 1947 se oficializó la competencia con otros encuentros y pasó a denominarse “Círculo de Ajedrecistas de Oberá”, cuyo primer presidente fue Virgilio Marín.
“Al principio se organizaban solo encuentros, gracias a que los inmigrantes traían tableros de Europa y los dejaban en el Café San Martín, sobre la calle Sarmiento, o en el club Social o la Casa del Docente. Allí se organizaban los encuentros”, contó Oliveira, en el cargo desde 2017.
“De todas maneras, la actividad ajedrecística de la época no era tan popular. Recién en la década del ‘90 se popularizó más y comenzó a llamarse Club Ajedrez Oberá”, indicó el mandatario. Fue en ese momento cuando la institución se fusionó con la Escuela Municipal de Ajedrez, con el objetivo de trabajar juntos en la difusión de la disciplina, una fusión que hasta el día de hoy continúa.
En 2017, después de más de 70 años difundiendo al juego ciencia, se convocó a una Asamblea General y el 19 de mayo se consiguió la Personería Jurídica y, por pedido de los socios, se cambió el nombre a Asociación Civil Club Ajedrez Oberá, con el objetivo de extender sus límites más allá de la Capital del Monte y comenzar a trabajar con todo el departamento y más. “Participó gente de todos los alrededores y fueron ellos quienes propusieron la asociación”, recordó Oliveira.
2018 fue uno de los años que quedará marcado en el libro histórico que arrancó la maestra y socia del club, Catalina Velázquez y que ya lleva tres tomos: fueron reconocidos por la Federación Argentina de Ajedrez como club socio y, ese mismo año, la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) le extendió el mismo reconocimiento como socio internacional.
“Oberá fue el segundo club misionero en conseguir ese reconocimiento, el primero fue el de Posadas”, indicó el presidente, que en 2019 fue invitado a participar de una serie de encuentros de ajedrez que se realizaron en Buenos Aires y donde estuvo presente el actual presidente de la FIDE, Arkady Dvorkovich. “Fue un orgullo poder estar presente”, dijo.
Oliveira, quien es árbitro nacional de ajedrez, uno de los tres que tiene Misiones. Gracias a ese reconocimiento “pudimos organizar el primer Torneo IRT Internacional de Oberá, en febrero de 2020”, agregó el presidente.
Luego, la pandemia de coronavirus obligó a organizar torneos virtuales, lo que sumó a muchos que se habían alejado y hoy compiten en la vuelta a la presencialidad. Además estableció el contacto con gente de España, así como clubes argentinos como River, Boca o Gimnasia de La Plata.
Desde el paulatino regreso a la presencialidad se sucedieron las competencias: en 2021 se hizo el IRT por el 80° aniversario, el IRT en abril de 2021 que contó con récord de participantes y el Torneo Internacional de Promesas Olímpicas 2026, en agosto del año pasado.
Este año ya se disputó el IRT “Copa Ciudad de Oberá” en febrero y dicha fecha ya se instaló en el calendario internacional, por lo que volverá a realizarse en febrero de 2023.
“En poco tiempo crecimos muchísimo y sabemos que el desafío diario es mantener todo lo que logramos. En los últimos años hubo mucho apoyo y eso hizo que el ajedrez crezca en la zona. Antes lo jugaban sólo los intelectuales. Nosotros buscamos que el ajedrez sea para todos y que todos tengan la misma posibilidad. Esa es la intención. Después cada jugador decidirá si quiere federarse y estudiar y seguir, pero queremos darle la oportunidad a todos y que las puertas se abran para que todos jueguen”, remarcó Oliveira.
Con ese objetivo se organizan los IRT, el torneo femenino del mes de marzo, representantes del club colaboran con otras instituciones y viajan hasta distintas localidades para sembrar la semilla del ajedrez. Y en Oberá se dictan clases los martes y viernes en la Casa de la Cultura.
En la actualidad el club cuenta con más de 170 socios y 72 jugadores federados. “En 2017, cuando conseguimos la Personería Jurídica eran sólo cinco”, recordó Oliveira.
“El ajedrez es pasión, para nosotros está presente en todo, en la música, en la historia, en los libros. La intención es mantenernos y que todo esto siga”, cerró el presi.
Lo lleva a todos lados
El Club colabora con clases de ajedrez para estudiantes de la carrera del profesorado en Matemática, del Instituto Arias de Saavedra, sede Oberá. “Se suma al ajedrez como herramienta educativa”, dijo Olivera.
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