Una vez más, una persona que no tiene título de docente se ampara en la tutela sindical de la Unión de Docentes de la Provincia de Misiones (UDPM) para seguir al frente de 22 horas cátedra de la asignatura de matemática.
Se trata del hijo del intendente de San Pedro, Miguel Dos Santos, quien enseña como si fuera profesor de matemática en calidad de interino, en el Bachillerato Orientado Provincial (BOP) 56 de esa localidad.
En una nota con fecha del 12 de mayo, el secretario de ese establecimiento secundario, Walter Marini, informó a la profesora de matemática Virginia Soledad González, quien pidió el desplazamiento de Dos Santos en esas 22 horas, que “no se podrá proceder al desplazamiento pedido por usted el día 11 de mayo del año 2022, en las horas de matemática, puesto que el señor Dos Santos se encuentra amparado por la Resolución 3547/14 del Consejo General de Educación (CGE)”.
Viveza criolla y el amparo de los sin título
No es la primera vez que un docente con título específico intenta desplazar al hijo del intendente que sólo cuenta con título secundario de bachiller.
El año pasado, otro profesor de matemática, Néstor Stadnechuk pidió el desplazamiento de Dos Santos y, al igual que ahora, las autoridades del establecimiento educativo le negaron ese derecho previsto en la Ley de Estatuto Docente. En esa ocasión, el docente titulado presentó un recurso de revocatoria por denegatoria de desplazamiento ante el CGE que tardó casi un año en resolver a su favor.
“Cuando el CGE, por Resolución 6339 del 31 de diciembre del 2021 por fin hizo lugar al reclamo de Stadnechuk, él ya tenía otro trabajo por lo que no asumió en las 22 horas de matemática y Dos Santos siguió en el cargo”, contó la secretaria general de la Unión Docente Nueva Argentina de Misiones (UDNAM), Estela Genesini.
Pero Dos Santos usó esa experiencia a su favor y, en vez de estudiar el Profesorado de Matemática, usó el camino más corto para atrincherarse en el cargo: ser delegado escolar de la UDPM.
Es que hasta el momento, todos los casos donde colisionan el derecho de un docente con título a desplazar a otro que no lo tiene, pero sí tiene la tutela sindical, el CGE se inclina por proteger a los delegados sindicales. Tampoco es casual que todos ellos sean de la UDPM.
Incluso en la Resolución 6339 donde el CGE hizo lugar al desplazamiento de Dos Santos que por entonces no tenía tutela gremial deja claro el criterio legal para estos casos: “tanto el Estatuto Docente como la Resolución 210 claramente establecen que cuando el título docente es específico en la materia automáticamente debe concederse el desplazamiento si quien se encuentra en el cargo no lo posee (…) y en los únicos casos en los cuales no corresponde el otorgamiento es cuando el docente que ocupa el cargo es titular o posee tutela sindical”.
Los platillos de la balanza
Dos Santos tiene mandato como delegado escolar hasta el 30 de junio próximo pero, según la ley, la tutela se extiende un año después de finalizado su mandato, es decir hasta junio del año que viene, tal como establece Ley 23.551 de Asociaciones Sindicales… eso si el hombre no busca su reelección como delegado escolar en el BOP 56. Mientras tanto, sus alumnos deberán seguir asistiendo a las clases de matemática de una persona que no estudió ni se certificó como docente y mucho menos como profesor de esa materia.
Paradójicamente, en nombre de la tutela gremial cuyo espíritu es la protección de los trabajadores en la defensa de sus derechos, se le deniega esas horas a la profesora de matemática formada y titulada para enseñar esa materia. Del derecho de los alumnos a recibir educación de calidad mejor ni hablemos.
Siete días sólo en la norma
En diálogo con PRIMERA EDICIÓN, la secretaria general de la UDNAM, Estela Genesini, recordó que “aunque parezca increíble, el año pasado logramos el desplazamiento de Dos Santos pero el Consejo General de Educación (CGE) tarda tanto tiempo en resolver los desplazamientos que cuando salió el instrumento, el docente se había cansado de esperar y había conseguido trabajo en otro lado, más precisamente en una estación de servicio”.
Genesini recordó que, según resolución del propio CGE, un desplazamiento debe resolverse en un plazo de siete días.
“Ahora es otra docente la que empezó el proceso de desplazamiento de las 22 horas de Dos Santos pero en el interín el hombre se avivó y se hizo delegado de UDPM y su consiguiente inmunidad gremial, lo que hace mucho más complejo el proceso”, señaló.
No obstante, según anticipó Genesini, acompañarán a la profesora de matemática Virginia Soledad González en la defensa de sus derechos, “primero en las vías administrativas, ante el CGE, y de no obtener solución al pedido de desplazamiento, acudiremos a la Justicia laboral como ya lo hicimos en varias oportunidades y donde hemos conseguido fallos favorables”.
Ya hay antecedentes judiciales sobre casos similares
Un caso similar al de Dos Santos llegó a la Justicia laboral (el Juzgado de primera instancia en lo laboral N° 1, cargo de Manuel Ángel Silva Dico) el año pasado y la sentencia dictada en diciembre sentó un importante precedente al fallar a favor de un docente con título que busca desplazar a otro sin título, pero con tutela sindical.
Fue la primera vez que la Justicia laboral falló en contra del criterio del Consejo General de Educación y dispuso la anulación de la Resolución 2841/20 en la que se había rechazado el desplazamiento solicitado por el profesor de Tecnología, Fernando Adoryan, en diez horas de Tecnología, a favor de Eduardo Román Frank, que sólo tiene título secundario pero era delegado escolar.
En esa ocasión, la Justicia consideró que “si bien la tutela sindical merece la máxima protección constitucional, dicha modalidad no puede servir a los efectos de vulnerar derechos fundamentales de los ciudadanos, en este caso de los docentes que han alcanzado una titulación competente, como así los niños y adolescentes que se ven beneficiados con el sistema educativo”.
Otro caso vergonzoso
A Cintia Kunkel, maestra titulada, le llevó tres años y seis meses desplazar a Irma Baier quien, con apenas un título de perito mercantil y un par de cursos, fue designada en 2015 como docente acompañante por un secretario escolar que poco después dejó de cumplir funciones y desde 2016 y hasta septiembre del año pasado cobró como maestra de grado interina en un cargo de la Escuela 380 de San Vicente.
En este caso no tenía tutela gremial y el CGE ordenó su desplazamiento pero el director de la 380 no acató esa orden. En una maniobra oscura, Baier pidió licencia y luego acudió a la Justicia pidiendo medida cautelar y un amparo a su favor. La Justicia hizo lugar pero luego resolvió el pedido como “improcedente”, por lo que Baier fue a Cámara y luego que esta ratificara el fallo de primera instancia acudió al Superior Tribunal de Justicia.